Sydney Sweeney tiene unos vaqueros geniales y por eso le llaman nazi

La cámara recorre de arriba abajo su cuerpo 90-60-90, mientras una dulce voz en off explica: "La composición de mi cuerpo la determinan mis vaqueros". Y luego: "Mis vaqueros son azules". Esto se puede ver en los nuevos anuncios de la marca de moda American Eagle. La it girl de Hollywood, Sydney Sweeney, conocida por las series "White Lotus" y "Euphoria", ha sido fotografiada para la marca completamente en vaqueros. El eslogan que preside toda la campaña es: "Sydney Sweeney tiene vaqueros geniales".

Un juego de palabras inofensivo, podría pensarse. Pero en inglés, "jeans" suena casi igual que "genes". A eso hay que sumarle que Sweeney, con su cabello rubio y ojos azules, representa un ideal de belleza que durante mucho tiempo se ha considerado muy blanco. En conjunto, esto es suficiente para desatar una tormenta de indignación: "¡Propaganda nazi!", es lo que se dice en redes sociales.

La actriz promueve una imagen de belleza que excluye a personas de diferentes orígenes, colores de piel y formas corporales, dicen quienes aún lo dicen con cariño. También hay una interpretación más dura: algunos usuarios de Instagram ya se refieren a la "Alemania de los años 30". Cuando las personas blancas celebran públicamente sus genes, dicen: "Ya sabemos adónde nos lleva eso".

Pero mientras algunos lo acusan de propaganda fascista, otros lo ven como una reacción exagerada de la "policía de la diversión". Incluso el senador republicano Ted Cruz de Texas se sintió obligado a alzar la voz. Comentó sobre X: "¡Guau! Ahora la izquierda desquiciada incluso se ha vuelto contra las mujeres hermosas".

No es casualidad que American Eagle esté provocando con su campaña. Anteriormente, la marca se centraba en la diversidad, la publicidad con personas de color y la positividad corporal. Esto no benefició a su negocio. Ahora se centra en un público objetivo diferente: uno más acorde con el espíritu reaccionario de la época estadounidense. El hecho de que se diga que el director ejecutivo, Jay Schottenstein, es fan de Trump encaja con la idea. La familia de Sweeney también ha posado en Instagram con gorras MAGA (Hacer que Estados Unidos sea grande). La propia actriz se ha distanciado de Trump, pero al parecer no de forma lo suficientemente convincente.

La joven de 27 años ahora recibe una doble dosis de críticas: primero, como la imagen de un anuncio supuestamente racista. Segundo, como una mujer que daña el feminismo con un atractivo sexual excesivo. La propia Sweeney ha guardado silencio hasta ahora. Esto es inusual para una mujer que normalmente llena su muro de selfis a diario.

Sea como sea, Sweeney ha demostrado un principio publicitario ancestral: el sexo vende. Los escándalos, aún más. Tras el lanzamiento de la campaña, las acciones de American Eagle se dispararon más del 12 %. Así que los vaqueros de Sweeney —¿o son sus genes?— se están vendiendo bien.

Un artículo del « NZZ am Sonntag »