Lleva solo una semana en Netflix y ya es lo más visto: un 'slasher retro' con graduación sangrienta, misterios y mucho gore

Un nuevo fenómeno del cine de terror ha escalado rápidamente en Netflix, convirtiéndose en lo más visto de la plataforma apenas una semana después de su estreno. Ambientada en 1988 y con todos los ingredientes del subgénero slasher, esta película recupera la estética vintage, los asesinatos encadenados y el suspense adolescente para los amantes del miedo clásico con sabor a videoclub.

El largometraje, estrenado el pasado 23 de mayo, sumerge al espectador en un instituto ficticio en plena temporada de graduaciones, donde las candidatas a reina del baile empiezan a desaparecer en circunstancias tan inquietantes como sangrientas. La joven Lizzie McVay comienza a darse cuenta de esto, y ella puede ser la siguiente en la lista.

La producción se sitúa dentro del universo creado por R.L. Stine, con un tono nostálgico que recuerda a títulos como Scream, Sé lo que hicisteis el último verano o Carrie, pero con una personalidad propia que la convierte en el estreno reciente más visto por los fans del terror adolescente en la plataforma.

Lo que empieza como una competencia estudiantil termina convirtiéndose en una pesadilla que saca a la luz secretos enterrados desde hace décadas, mientras la sangre cubre los pasillos de la escuela y las tiaras se convierten en armas mortales. El éxito fulgurante de esta película, dirigida por Matt Palmer, se debe a su correspondencia con una saga antológica, La calle del terror, que Netflix ha explotado desde 2021.

Este capítulo, titulado La reina del baile, ahonda en la historia del pueblo maldito de Shadyside con una trama que mezcla asesinatos, secretos familiares y una coreografía al ritmo de tacones imposibles. Protagonizada por India Fowler, Fina Strazza y Katherine Waterston, la cinta ha sabido conectar con una audiencia ávida de emociones fuertes y humor negro que nunca pasa de moda.