Afidro pide consenso técnico para definir la UPC 2026 y garantizar la sostenibilidad del sistema de salud

La Asociación de Laboratorios Farmacéuticos de Investigación y Desarrollo (Afidro) hizo un llamado urgente a todos los actores del sistema de salud colombiano para que trabajen de manera conjunta en la definición adecuada de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) para 2026, en un contexto marcado por dificultades financieras crecientes que amenazan la atención en salud de millones de ciudadanos.

“La UPC 2026 no puede calcularse con base exclusivamente en la inflación, ya que esta no refleja de forma adecuada las necesidades ni la dinámica propia del sistema de salud”, señaló Ignacio Gaitán, presidente de Afidro. “Además, no se trata solo de incrementar el valor de la UPC, sino de garantizar un cálculo adecuado, técnico, con consenso y voluntad. Tener trazabilidad y garantizar eficiencia”, añadió.

El gremio farmacéutico advirtió que el ajuste insuficiente de la UPC, sumado al aumento en las peticiones, quejas y reclamos (PQR), está afectando de manera directa el acceso de los pacientes a los tratamientos que necesitan. Según cifras de la Contraloría General de la República, las PQR pasaron de 1,3 millones en 2023 a 1,6 millones en 2024, lo que representa un incremento del 23 %. De acuerdo con un informe reciente de la organización de pacientes Retorno Vital, los tiempos de espera para recibir medicamentos pueden extenderse hasta 250 días, y para acceder a una cita médica, hasta tres meses.

El impacto financiero también ha repercutido directamente en las operaciones de las empresas afiliadas a Afidro, cuya cartera total alcanzó los 4,6 billones de pesos a finales de 2024. Esta situación, agravada por retrasos en los giros de los presupuestos máximos, deficiencias en la gestión de recursos y altos niveles de desperdicio, pone en riesgo la sostenibilidad del sistema.

“Aunque los retos son importantes, con voluntad política, consenso y el compromiso de los sectores implicados, es posible impulsar reformas estructurales positivas que garanticen una atención en salud digna, oportuna y sostenible”, añadió Gaitán. “Invitamos a todos los líderes y actores del sector a sumarse a un enfoque propositivo y colaborativo que apueste por soluciones reales y duraderas con foco en los pacientes”.

El próximo 30 de julio, diferentes actores del sistema se reunirán para revisar y ajustar la UPC. Para Afidro, este espacio debe marcar el inicio de una transformación estructural del sistema de salud colombiano, que requiere visión técnica, voluntad de diálogo y corresponsabilidad. “La adaptación de la UPC y la gestión eficiente de los recursos no solo son cuestiones técnicas, sino que son determinantes para el bienestar de millones de ciudadanos”, concluyó el gremio.

Periodista de Medioambiente y Salud