Los ocho pueblos argentinos que buscan estar entre los mejores del mundo en 2025

Ocho destinos argentinos tienen, este año, la chance de ubicarse entre los mejores pueblos del mundo.

Se trata de pueblos que fueron seleccionados por un jurado convocado por la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación -donde se acaba de hacer el anuncio oficial de los nominados- para participar de Best Tourism Villages, iniciativa global liderada por ONU Turismo que, cada año, busca reconocer a aquellas comunidades ubicadas en entornos rurales, con menos de 15.000 habitantes, que se destacan por preservar y promover sus valores culturales y naturales y su estilo de vida.

Durante el acto oficial de presentación de los candidatos argentinos 2025 estuvieron Daniel Scioli, al frente de la Secretaría de Turismo, Ambiente y Deporte; Zurab Pololikashvili, secretario general de ONU Turismo; Gustavo Santos, director regional para las Américas de ONU Turismo; Valentín Díaz Gilligan, presidente del Consejo Federal de Turismo y Gustavo Hani, presidente de la Cámara Argentina de Turismo.

A diferencia de otros reconocimientos turísticos, Best Tourism Villages no premia a los destinos más populares, que cuenten con paisajes imponentes o con la mejor infraestructura turística, sino a aquellos que, mediante el turismo, promueven el desarrollo de la actividad, transmiten sus valores culturales y naturales y preservan su estilo de vida, entre otros aspectos que se tienen en cuenta.

Los resultados finales de la competencia se darán a conocer a partir de octubre, cuando ONU Turismo anuncie a los pueblos distinguidos a nivel mundial.

Los pueblos que sean elegidos se sumarán a la lista de otros que ya recibieron este reconocimiento en años anteriores, como Caspalá, en Jujuy, Trevelin, en Chubut, o La Carolina, en San Luis (ver más abajo).

Los ocho destinos seleccionados para competir en la edición 2025 de Best Tourism Villages son:

Con 1.120 habitantes en el corazón de la provincia, es una de las principales puertas de entrada a los Esteros del Iberá, por lo que se ha transformado en uno de los destinos más representativos del turismo de naturaleza en la Argentina.

El desarrollo turístico de la localidad comenzó a tomar fuerza con la creación de la Reserva Provincial Iberá, luego transformada en Parque Nacional. Desde entonces, el crecimiento de establecimientos gastronómicos y hoteleros de calidad ha acompañado el auge de visitantes interesados en el ecoturismo y la conservación ambiental.

Entre las actividades más destacadas que se pueden practicar en Carlos Pellegrini están el avistaje de aves y fauna autóctona como carpinchos, ciervos de los pantanos y yacarés.

Ubicada a poco más de 300 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, Villa Elisa se presenta como un destino ideal para quienes buscan descanso, naturaleza y un ambiente acogedor.

Con una población de 14.000 habitantes, combina la tranquilidad del entorno rural con servicios de calidad, y mantiene vivo el legado de los inmigrantes, que se refleja en su cultura del trabajo, sus paisajes agrícolas, su gastronomía casera y, sobre todo, en la hospitalidad de su gente.

Su principal atractivo turístico son las conocidas aguas termales, fuente natural de relajación y salud, que se complementan con una propuesta al aire libre en un entorno ordenado y en armonía con la naturaleza.

Este encantador pueblo de casi 3.000 habitantes se ubica al pie del cerro Champaquí -el punto más alto de la provincia-, en pleno valle de Traslasierra.

Su entorno privilegiado se caracteriza por un territorio cubierto en un 80 por ciento por bosque nativo, lo que no solo garantiza aire puro y vistas excepcionales, sino también un compromiso con la preservación ambiental.

El lugar propone una experiencia turística orientada al bienestar y el contacto directo con la naturaleza, con actividades como trekking, enoturismo, ecoturismo y turismo rural que son parte de una oferta diversa, ideal para quienes buscan descansar, reconectar y explorar el paisaje serrano.

A poco menos de 80 kilómetros de San Salvador de Jujuy, Maimará se alza como una joya cultural y paisajística de la Quebrada de Humahuaca, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco como “paisaje cultural”.

Con una población de unos 3.500 habitantes, este pueblo conjuga la fuerza de las tradiciones ancestrales con una naturaleza imponente coronada por la Paleta del Pintor, una espectacular formación montañosa multicolor atravesada por el río Grande.

Este paisaje, que parece una obra de arte natural, enmarca los valles donde se cultivan frutas, hortalizas, flores y viñedos que dan origen a reconocidos vinos de altura.

También es tierra de profundas raíces culturales, que se expresan sobre todo en festividades tradicionales como la celebración de la Pachamama y el Carnaval.

Menos de 200 personas habitan este pintoresco pueblo ubicado en los espectaculares Valles Calchaquíes, a orillas del río Calchaquí y a pocos metros de la Ruta Nacional 40. Con unos mil habitantes más en sus alrededores y rodeado por cumbres de la precordillera de los Andes, en este rincón de los Valles la cultura, la historia y la naturaleza se entrelazan para ofrecer una experiencia auténtica y profundamente salteña.

Declarado Lugar Histórico Nacional, Seclantás conserva en sus calles, iglesias y construcciones coloniales un valioso patrimonio que invita a viajar en el tiempo y a descubrir la identidad del noroeste argentino.

Más allá de su riqueza arquitectónica, el pueblo también es reconocido por un legado cultural que trasciende generaciones: es conocido como Cuna del Poncho Salteño, y a lo largo de su calle principal se pueden recorrer distintos talleres y telares, y contemplar a los artesanos en pleno trabajo.

A 100 kilómetros de Bahía Blanca y 12 de Sierra de la Ventana, en el partido de Tornquist, Saldungaray combina historia, paisajes serranos y un valioso legado arquitectónico, además de una bodega que ofrece visitas guiadas y degustaciones.

Con una población de aproximadamente 1.300 habitantes, se ubica en un valle del sistema serrano de Ventania y sus orígenes se remontan a principios del siglo XIX, cuando en el lugar se estableció un fortín militar destinado a proteger a los primeros hacendados que comenzaban a instalarse en la región. Hoy se puede visitar una representación de ese legado histórico.

Uno de los aspectos más distintivos es su patrimonio arquitectónico, especialmente a partir de la huella que dejó el arquitecto Francisco Salamone mediante la construcción de varias obras en su reconocido estilo monumental.

Un pueblo de 7.000 habitantes ubicado a los pies del imponente Nevado del Famatina, que domina el paisaje y le da identidad a la región. A este marco natural Famatina le aporta un valioso patrimonio histórico, natural y cultural en el que se destaca el paso del Camino del Inca o Qhapaq Ñan, una red vial ancestral declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Además de su riqueza histórica y paisajística, la localidad es reconocida por sus producciones agrícolas, especialmente de nogal, vid, olivo, hortalizas y frutas. La zona también invita a los visitantes a disfrutar de actividades al aire libre, como el montañismo y otros deportes de aventura, que encuentran en el entorno natural un escenario privilegiado.

Este pueblo de 6.300 habitantes se encuentra en el departamento Las Heras, inmerso en el majestuoso entorno de la cordillera de los Andes.

Rodeado de imponentes montañas y verdes oasis, no solo ofrece un paisaje inolvidable, sino que también guarda una rica historia marcada por hechos significativos a lo largo de los siglos.

Gracias a su posición estratégica, se convierte en la puerta de entrada a los sitios turísticos más emblemáticos de Mendoza, tales como el cerro Aconcagua, el centro de esquí Penitentes y el icónico Puente del Inca.

Además, ocupa un lugar clave en la historia de la gesta sanmartiniana, ya que fue uno de los pasos fundamentales en el Cruce de los Andes realizado por el general San Martín y su ejército libertador.

Desde la creación de la iniciativa Best Tourism Villages, en 2021, la Argentina obtuvo seis distinciones de parte de ONU Turismo.

En aquella primera edición el premiado fue Caspalá, en Jujuy; en tanto en la segunda, en 2022, la distinción fue para La Carolina, un pequeño pueblo de pasado minero en la provincia de Jujuy.

Más distinciones llegaron en 2024, cuando nuestro país sumó a la lista a Trevelin y Gaiman (Chubut), Caviahue-Copahue (Neuquén) y Villa Tulumba (Córdoba), con lo que ya suman seis los pueblos argentinos reconocidos por ONU Turismo por su compromiso con un modelo de turismo que pone en valor a las comunidades.

Con las nuevas postulaciones, el país espera sumar más reconocimientos este año.