Suiza: El colapso de un glaciar destruye el pueblo de Blatten
El derrumbe del glaciar Birch, ocurrido el miércoles 28 de mayo, destruyó en gran parte el pueblo de Blatten, una comuna suiza del cantón de Valais situada en el valle de Lötschental, y dejó una persona desaparecida. "Hoy hemos perdido el pueblo, pero no nuestro corazón", declaró durante una rueda de prensa el alcalde de la pequeña localidad, que contaba con 300 habitantes antes de su evacuación completa la semana anterior.
El colapso del glaciar se esperaba desde hacía varios días, pues ya se habían producido numerosos desprendimientos de rocas en la parte montañosa que lo domina. Muchas casas de este pueblo fueron destruidas por la masa de hielo y rocas. Una persona está desaparecida, un vecino de 64 años que, según información de la policía cantonal del Valais, se encontraba en la zona en el momento del incidente.
Tres rescatistas fueron lanzados en helicóptero cerca del abanico aluvial para buscar a la persona desaparecida, y también se desplegó un dron equipado con una cámara térmica para detectar el calor corporal, dijo la policía en un comunicado. Las condiciones meteorológicas eran malas el miércoles por la tarde, pero se espera que mejoren el jueves.
Colapso masivoAlrededor de las 15.30 horas, el derrumbe masivo ocurrido en el glaciar Birch arrastró ladera abajo hacia la comuna, que incluye las aldeas de Eisten, Ried y Weissenried, ubicadas a una altitud de alrededor de 1.500 metros, según las autoridades de emergencia en esta parte del cantón de Valais.
Se creó una unidad de apoyo, especialmente psicológica, para ayudar a los habitantes tras percatarse de la magnitud de la destrucción. Las imágenes publicadas en YouTube muestran una enorme nube de hielo y escombros rodando por la montaña con vistas al valle donde fluye el río Lonza y donde se encuentra Blatten. La fuerza y la velocidad de la nube son tales que continúa su curso en la vertiente opuesta del valle.
Según Raphaël Mayoraz, responsable cantonal de la gestión de los riesgos naturales, «3 millones de metros cúbicos de rocas cayeron repentinamente sobre el glaciar, arrastrándolo consigo» hacia el valle. Es muy, muy raro. No conocemos ningún ejemplo en la historia. «Ahora todo se ha derrumbado», dijo. «Es un acontecimiento extraordinario», añadió Albert Rösti, consejero federal de Medio Ambiente.
presa naturalSu colega, Martin Pfister, encargado de defensa y seguridad civil, precisó que el ejército se desplaza al lugar para evaluar la situación y hacer balance de los medios precisos a implementar.
La presa natural que se ha formado en el río Lonza y que está provocando la formación de un lago preocupa a las autoridades: «El atasco tiene unos dos kilómetros de largo en el Lonza (...), es como una montaña y, por supuesto, crea un pequeño lago que se hace cada vez más grande. Y ese es un riesgo que debemos vigilar», declaró Mayoraz.
Se vació preventivamente una presa artificial para recibir el agua que el muro de hielo, tierra y escombros empujaba hacia atrás. Si el agua se desbordara de esta presa artificial, sería necesario considerar la evacuación del valle, pero este peor escenario tiene una baja probabilidad de ocurrir. El Lonza tiene un caudal relativamente limitado.
El gobierno cantonal del Valais ha pedido al ejército que proporcione bombas para asegurar el lecho del río, equipos de limpieza y postes de iluminación.
El mundo con AFP
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