Louvre: Rachida Dati lanza un concurso internacional de arquitectura para renovar el museo

La ministra de Cultura, Rachida Dati, anunció el viernes 27 de junio el lanzamiento de un concurso internacional de arquitectura para el gran proyecto de renovación y transformación del Museo del Louvre, anunciado en enero por el Palacio del Elíseo.

«Nos enorgullece anunciar el lanzamiento del concurso internacional de arquitectura para el proyecto «Louvre - Nuevo Renacimiento», impulsado por la voluntad del presidente de la República, Emmanuel Macron», escribe Rachida Dati en su mensaje. «Cuarenta años después de la pirámide del Gran Louvre, un nuevo impulso arquitectónico y cultural», añade.

El 28 de enero, Emmanuel Macron anunció un vasto plan de adecuación del Louvre, el museo más visitado del mundo con cerca de nueve millones de visitantes anuales (80% extranjeros) en 2024 y cerca de diez millones antes de la crisis sanitaria, que sufre problemas de deterioro.

Se prevé la creación de una nueva entrada principal en el lado este del antiguo castillo, lo que implicará la remodelación de la explanada que la bordea. También se creará un espacio dedicado a la famosa Mona Lisa de Leonardo da Vinci, así como nuevas salas de exposición bajo el patio cuadrado del museo.

La pirámide, inaugurada en 1988 y encargada por el expresidente François Mitterrand, se considera estructuralmente anticuada, ya que fue diseñada para albergar a cuatro millones de visitantes al año. El objetivo también es abordar los problemas de daños en espacios degradados y satisfacer las necesidades de seguridad y estándares ambientales, mejorando al mismo tiempo el confort y la calidad de la protección de las obras.

El coste del proyecto se ha estimado entre 700 y 800 millones de euros a lo largo de diez años, de los cuales solo una pequeña parte será financiada por el Estado. Se han presupuestado diez millones para los estudios iniciales en 2025. Los sindicatos CGT y SUD lo han estimado en más de mil millones de euros .

El 1 de enero de 2026 entrará en vigor una entrada más cara para extranjeros no pertenecientes a la UE. Este precio diferenciado podría generar veinte millones de euros adicionales al año si la entrada se fija en 30 € (en comparación con el precio actual de 22 €) y si la asistencia alcanza los doce millones de visitantes anuales, el objetivo del presidente. También se prevé una entrada independiente para la visita guiada a las colecciones y la admiración de la Mona Lisa.