Los snacks son menos populares en Estados Unidos

Los estadounidenses comen menos snacks, y eso preocupa a los gigantes de la comida chatarra . Galletas, barras de chocolate y otras papas fritas de todo tipo se encuentran entre los snacks que los estadounidenses han estado abandonando en los supermercados en los últimos meses, según informó el Financial Times (FT) el domingo 6 de julio.
Los snacks dulces son los más afectados: las ventas unitarias de dulces han caído un 6,1% en ambos lados del Atlántico, mientras que las de snacks salados han caído un 1,2% durante el último año, según el diario económico y financiero británico, que se basa en datos de pagos recopilados por la firma NielsenIQ.
El Financial Times ha analizado estudios que ofrecen varias explicaciones para este fenómeno. En primer lugar, los consumidores estadounidenses están reduciendo sus gastos. Con presupuestos cada vez más ajustados, los consumidores cocinan más para sí mismos o son más propensos a gastar su dinero en refrigerios que perciben como más saludables. A diferencia de las ventas de refrigerios con alto contenido de sal y azúcar, las alternativas más saludables, como las barritas nutritivas y los yogures, están en auge.
Varios observadores citados por el periódico también sugieren que los nuevos tratamientos contra la obesidad están alterando los hábitos alimentarios de los consumidores. Estos fármacos, entre ellos la semaglutida de Novo Nordisk (Ozempic/Wegovy) y la tirzepatida de Eli Lilly (Mounjaro), pueden cambiar profundamente la relación de los pacientes con la comida, reduciendo el apetito al mejorar su capacidad de sentirse saciados.
Esta caída del consumo está causando problemas a las principales empresas alimentarias del sector, como PepsiCo, General Mills, JM Smucker y Campbell's. El fenómeno está volviendo para atormentarlas como un bumerán, tras años de subidas de precios.
Esta tendencia pone en tela de juicio las apuestas realizadas en los últimos años, cuando muchos de estos gigantes multiplicaron sus adquisiciones de marcas de snacks, a veces por miles de millones de dólares, para impulsar su crecimiento, creyendo que los consumidores mantendrían sus hábitos. Como Kellogg's, por ejemplo, que creó y cotizó en bolsa la empresa Kellanova en 2023 con la ambiciosa visión de convertirse en un gigante mundial de los snacks.
Los fabricantes de snacks también se enfrentan a una mayor competencia de los restaurantes de comida rápida, muchos de los cuales han empezado a ofrecer menús a $5. Esto los ha impulsado a considerar otras alternativas, como ofrecer tamaños más pequeños para atraer al cliente menos ideal o introducir nuevos sabores para impulsar las ventas.
Libération