Política: Nicolas Sarkozy expulsado de la Legión de Honor tras su condena por corrupción

Condenado por el caso de las escuchas telefónicas, Nicolas Sarkozy también ha sido excluido de la Orden Nacional del Mérito. Es el segundo jefe de Estado francés en ser privado de esta distinción, después de Pétain.
Se trata de un castigo extremadamente raro para un ex presidente: Nicolas Sarkozy fue expulsado de la Legión de Honor tras su condena, que ya es firme, a un año de cárcel por corrupción en el caso de las escuchas telefónicas, según un decreto publicado este domingo en el Diario Oficial.
El expresidente (2007-2012), también excluido de la Orden Nacional del Mérito, se convierte así en el segundo jefe de Estado francés en ser privado de esta distinción, tras el mariscal Pétain. La Legión de Honor le fue retirada al soldado tras su condena en agosto de 1945 por alta traición y conspiración con el enemigo.
Una exclusión automáticaEsta decisión, altamente simbólica, se esperaba desde que la condena de Nicolas Sarkozy en el caso de las escuchas telefónicas se hizo firme tras la desestimación de un recurso por parte del Tribunal de Casación en diciembre. En este caso, el exjefe de Estado fue declarado culpable de haber intentado, en 2014, sobornar a un magistrado del Tribunal de Casación, Gilbert Azibert, con la esperanza de obtener información confidencial y con la ayuda de su abogado , Thierry Herzog. Los tres fueron condenados, en primera instancia y en apelación, a la misma pena de tres años de prisión, una de las cuales fue suspendida.
Tras el rechazo de su última apelación en Francia, Nicolas Sarkozy quedó sujeto a la exclusión de la Legión de Honor, la cual se otorga automáticamente cuando el destinatario es condenado definitivamente por un delito o recibe una pena de prisión de un año o más. En estos casos, la retirada es "de pleno derecho", subrayó en marzo el Gran Canciller de la Legión de Honor, el general François Lecointre, quien firmó el decreto que despojaba a Nicolas Sarkozy de los dos títulos que le otorgaban, entre ellos la Gran Cruz, el rango más alto.
Macron no estaba a favor.Durante el proceso, el exlíder de la derecha francesa pudo presentar sus observaciones a la Gran Cancillería, según supo una fuente cercana al caso. «El Gran Canciller de la Legión de Honor consultó con eminentes juristas para garantizar la correcta aplicación de la legislación vigente en este caso específico», declaró la Gran Cancillería.
En las últimas semanas, la perspectiva de ver al expresidente despojado de su Legión de Honor había provocado recriminaciones en la derecha y suscitado reservas en las altas esferas del gobierno. «Desde mi punto de vista, desde mi perspectiva, creo que no sería una buena decisión», declaró Emmanuel Macron a finales de abril en el marco de un viaje a Madagascar. «Creo que es muy importante que (...) los expresidentes sean respetados y, por lo tanto, como Presidente de la República, como Gran Maestre (de la Legión de Honor, n.d.), no tomaré ninguna decisión de este tipo», afirmó, a pesar de no estar llamado a intervenir en casos de retirada de iure, como el de Nicolas Sarkozy.
La necesidad de mantener el carácter "ejemplar" del ordenComo Gran Maestre, el Presidente de la República solo tiene voz en los procedimientos disciplinarios clásicos en los que no se cumplen las condiciones para la baja automática. El Jefe de Estado interviene entonces en último lugar para decidir la sanción, tras consultar al Consejo de la Orden, que puede recomendar una amonestación, una suspensión o una expulsión.
Refiriéndose al caso de Nicolas Sarkozy en marzo, el Gran Canciller de la Legión de Honor reconoció que el oprobio de la exclusión fue sentido con extrema pena por la persona afectada. Sin embargo, este exjefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas insistió en la importancia de las sanciones disciplinarias para mantener el carácter ejemplar de la Orden de la Legión de Honor.
En virtud de la orden firmada el 5 de junio, los dos coacusados de Nicolas Sarkozy, Gilbert Azibert y Thierry Herzog, también quedan excluidos de la Legión de Honor y de la Orden Nacional del Mérito. Además del cargo de escuchas telefónicas, Nicolas Sarkozy está implicado en varios procesos judiciales y, en particular, compareció ante el tribunal a principios de 2025 bajo sospecha de financiación libia de su campaña presidencial de 2007. El veredicto en este caso se conocerá a finales de septiembre.
Le Progres