«Una forma de suicidio colectivo»: Sandrine Rousseau, sorprendida por la moratoria sobre las energías renovables votada en la Asamblea.

Mientras los diputados examinaban el jueves por la noche un texto sobre el futuro energético en Francia, para sorpresa de todos, votaron a favor de una moratoria sobre la energía fotovoltaica y eólica , gracias a los votos combinados de RN y LR (65 a favor, 62 en contra).
Sandrine Rousseau se indignó en la Cámara y todavía no lo puede creer en RMC este viernes.
"Es una forma de suicidio colectivo lo que estamos organizando", dice en Apolline Matin.
La diputada del Partido Verde por París cuestiona el aspecto psicológico de esta decisión de votar en contra de los datos científicos. «Lo sabemos, tenemos todos los estudios científicos, ¡y tomamos decisiones que van en contra de ellos!», dice, desconcertada.

Mientras tanto, en la Cámara, el escepticismo climático triunfa. No lo entiendo... Asumir la responsabilidad del calentamiento global no es fácil. Sí, prometo sangre y lágrimas, pero prometo hacerlo con solidaridad. Prometo luchar para lograr el cambio correcto», explica.
Basta de esta irresponsabilidad. Basta de este comportamiento de adolescentes que no quieren afrontar el problema. Se trata de la vida de nuestros hijos.
Señala y lamenta la ausencia de los diputados del Renacimiento, aunque Jean-Philippe Tanguy saborea su victoria: "Si creen que deberían haber votado de otra manera, sus diputados deberían haber estado allí, pero están ausentes", constata.
«Durante las últimas dos o tres semanas, la Asamblea Nacional se ha estado desmoronando», analiza Sandrine Rousseau. «Es como si Francia no tuviera gobierno. François Bayrou conduce un coche con los ojos cerrados, sin rumbo, sin rumbo...», rebate.
RMC