Reino Unido. Turista muere en Turquía, cuerpo devuelto a familia... sin corazón

Cuando viajar se convierte en una pesadilla... Es un asunto sórdido el que sacude al Reino Unido. Beth Martin, una mujer británica de 28 años, murió durante un viaje a Turquía en abril pasado. Según informaron el Daily Mail y The Telegraph , la autopsia realizada por los médicos británicos tras la repatriación del cuerpo a principios de mayo reveló que el corazón de la joven estaba... ausente. La familia de esta madre de dos hijos exige respuestas a las autoridades turcas.

El 26 de abril, mientras viajaba en avión a Estambul con su marido y sus dos hijos, Beth Martin se sintió mal. Lo que parece una intoxicación alimentaria resulta ser más preocupante. La joven fue hospitalizada al día siguiente en el Hospital Universitario de Mármara en Estambul.

En un video publicado en su cuenta de Instagram, una amiga de la pareja dijo: «La compañía de seguros quería trasladarla a un hospital privado, pero el hospital público de Estambul no quiso cooperar […] La trasladaron a otro hospital para hacerle una angiografía, pero dijeron que el corazón estaba bien, así que no la trasladaron a un hospital privado. Luego falleció».

Otro amigo, Robert Hammond, testificando en una página en línea de recaudación de fondos para la familia, dijo que la familia no fue informada de la gravedad de la condición de Beth Martin. Su marido, Luke Martin, incluso fue detenido brevemente por la policía turca bajo sospecha de envenenar a su esposa, antes de ser finalmente liberado. Supuestamente el hombre fue interrogado "utilizando personal del hotel como traductores, antes de obligarlo a firmar un documento que declaraba que su esposa había muerto a las 9 a.m. de ese día", informó The Telegraph .

Sin embargo, la familia pudo visitar a Beth Martin durante el día mientras ella aún estaba viva. Finalmente sucumbió esa misma noche. Según documentos oficiales, Beth Martin murió de un "paro cardíaco resultante de una insuficiencia orgánica múltiple".

Fue sólo cuando se realizó la autopsia, tras la repatriación del cuerpo, que la familia supo lo impensable: la ausencia del corazón. Las autoridades turcas, por su parte, afirman que la joven "no fue sometida a ninguna cirugía durante su estancia en el hospital" y que no fue necesario "extirparle ningún órgano". La justicia británica ha abierto una investigación para intentar esclarecer las causas reales de la muerte de Beth Martin y explicar la ausencia de su corazón.

Los familiares de la madre de dos hijos también han abierto una campaña de recaudación de fondos, titulada "De unas vacaciones familiares a una pérdida inimaginable", para ayudar a cubrir los gastos de hospitalización y funeral. Ya se han recaudado casi 260.000 libras (unos 310.000 euros).