La WNBA no puede verificar los comentarios de odio hacia Reese

La WNBA anunció el martes que no pudo corroborar un informe de comportamiento racista de los fanáticos en un partido entre Indiana y Chicago en el Gainbridge Fieldhouse en Indianápolis a principios de este mes.

"Hemos investigado el informe sobre el comportamiento racista de los aficionados en las inmediaciones de la cancha durante el partido del 17 de mayo de 2025 entre Chicago Sky y Indiana Fever ", declaró la liga en un comunicado. "Con base en la información recopilada hasta la fecha, incluyendo la de los aficionados, el personal del equipo y del estadio, así como la revisión de audio y video del partido, no hemos podido corroborarlo".

La WNBA se compromete a fomentar un entorno seguro e inclusivo para todos y seguirá vigilando la aplicación de nuestro código de conducta para los aficionados.

La WNBA había estado investigando lo que denominó "comentarios de odio de los aficionados" que supuestamente ocurrieron después de que Caitlin Clark, de Indiana, cometiera una falta contra Angel Reese, de Chicago, en el tercer cuarto del primer partido de la temporada de ambos equipos. Reese protestó por la falta, que posteriormente se convirtió en flagrante 1. Tanto Reese como Aliyah Boston , de Indiana, recibieron faltas técnicas después de que Reese intentara confrontar a Clark y Boston interviniera para mantenerlas separadas.

Después del partido, Reese y Clark, que se enfrentaban por séptima vez en su continua y muy comentada rivalidad, restaron importancia al incidente entre ellos.

"Jugada de baloncesto", dijo Reese. "Los árbitros acertaron. A seguir adelante".

Ninguno de los equipos mencionó ni aludió a comentarios de los aficionados en las ruedas de prensa posteriores al partido, tras la victoria de Indiana por 93-58. Sin embargo, el tema se convirtió en tema de conversación en redes sociales, y la WNBA anunció que investigaría. Jugadoras de ambos equipos expresaron posteriormente su apoyo a la investigación y a los esfuerzos de la liga por estar alerta ante el comportamiento de los aficionados.

Reese hizo caso omiso de las preguntas sobre la investigación antes del partido del martes por la noche contra el Phoenix Mercury, diciendo que estaba "concentrada en el juego de hoy" y más preocupada por ayudar al Sky a obtener su primera victoria de la temporada después de un comienzo de 0-3.

El entrenador de primer año, Tyler Marsh, se hizo eco de los sentimientos de su delantero estrella.

"Agradecemos la investigación que se está llevando a cabo y esperamos que la liga siga tomando las medidas necesarias para garantizar un entorno seguro para todos, incluidos los jugadores", dijo Marsh. "Pero esta noche, la atención se centra en el partido".

A principios de este mes, se le preguntó a Reese si podía proporcionar a la WNBA detalles del incidente, pero no especificó si lo había hecho. Tampoco reveló qué tipo de comentarios se hicieron ni ningún otro detalle sobre lo que motivó la investigación.

Tanto Fever como Sky emitieron comunicados el martes agradeciendo a la liga por su respuesta a las acusaciones.

"Agradecemos el proceso rápido y exhaustivo que llevó a cabo la WNBA para investigar estas acusaciones, que no fueron corroboradas", declararon las Fever el martes. "En Gainbridge Fieldhouse, nos comprometemos a brindar la mejor experiencia de baloncesto posible a jugadoras y aficionados, donde el discurso de odio no tiene cabida".

El Sky dijo que agradeció la "rápida acción" tomada por la liga y el Fever para investigar el asunto.

"Este proceso demuestra la firme postura de la liga para detener el odio en todos los juegos y eventos de la WNBA y continuaremos apoyando esos esfuerzos", se lee en su declaración.

The Associated Press contribuyó a este informe.