Alto funcionario antimonopolio de la administración Trump enfrenta críticas por su enfoque, dicen fuentes

Washington — La fricción interna con el equipo del Departamento de Justicia que lucha contra los monopolios ha llevado a conversaciones privadas en la administración Trump sobre si despedir a parte del personal de la división antimonopolio o trabajar para suavizar los problemas, según múltiples fuentes familiarizadas con la situación.

Gail Slater, quien en marzo se hizo cargo de las demandas contra Capital One, Apple , Google y otras grandes empresas como jefa de la división antimonopolio del Departamento de Justicia, todavía cuenta con el apoyo de algunos altos funcionarios de la administración, pero ella y algunos miembros de su equipo han sido blanco de críticas de colegas y líderes empresariales, dijeron a CBS News fuentes dentro y fuera de la administración.

Se le pidió a Slater que asistiera a una reunión en la Casa Blanca el jueves con otros altos funcionarios de la administración, según informaron dos fuentes. La reunión, que se espera se centre en la política de fusiones, incluirá la participación de la Oficina de Presupuesto y Gestión, el Consejo Económico Nacional y la Comisión Federal de Comercio.

Según fuentes, ha habido fricción por la gestión de las investigaciones sobre T-Mobile, Hewlett Packard Enterprise y otras. La división antimonopolio es una de las dos agencias que protege la competencia en los mercados mediante la aplicación de las leyes antimonopolio que regulan las fusiones y las prácticas comerciales que perjudican a los consumidores.

Slater, quien asumió el cargo con gran prestigio tanto en los círculos MAGA como entre los organismos de control de izquierda, no ha adoptado una estrategia de bloquear todas las fusiones. Sin embargo, algunos funcionarios de Trump han expresado abiertamente que ha sido necesario un tira y afloja interno considerable para llegar a acuerdos que resuelvan los problemas de las fusiones, según tres de las fuentes.

Han surgido preguntas dentro de la NEC, la FTC, la Comisión Federal de Comunicaciones y en otros rincones de la administración sobre si las políticas del presidente Trump son la prioridad de Slater o si ella está forjando su propia agenda política, dijeron las fuentes.

Slater también ha instado a las empresas a no intentar contactar con la administración a través de cabilderos y consultores afines a Trump, según varias fuentes. La frustración con esta estrategia llevó a los líderes empresariales a contactar a funcionarios de la Casa Blanca preguntándose por qué se les indicaba a quién podían contratar, según dos fuentes.

Fuentes indicaron que, en una reunión entre funcionarios antimonopolio, Hewlett Packard Enterprise y Juniper Networks, una empresa de software que buscaba adquirir, Slater les indicó a las partes empresariales que solo debían trabajar directamente con funcionarios del Departamento de Justicia, no a través de consultores externos. Entre los consultores de HPE se encontraban Mike Davis y Arthur Schwartz, aliados de Trump, quienes no estaban presentes.

La fiscal general Pam Bondi y sus adjuntos están al tanto de la tensión de algunos funcionarios de la administración con la división antimonopolio, dijeron las fuentes.

El Departamento de Justicia presentó una demanda para impedir que Hewlett Packard Enterprise comprara Juniper en enero, y las dos partes resolvieron la demanda en junio, allanando el camino para el cierre de la adquisición.

Pero varias fuentes dijeron que el jefe de gabinete de Bondi, Chad Mizelle, tuvo que anular la decisión de Slater para aceptar una oferta de Hewlett Packard/Juniper, que los funcionarios del Departamento de Justicia confiaban en que era mejor que lo que el gobierno podría haber obtenido en el juicio.

Algunos funcionarios de la administración defendieron a Slater como una persona de profundos principios y loablemente desconfiada de los aliados bien conectados de Trump que quieren influir en el resultado de asuntos legales confidenciales.

Una fuente dijo que Slater ha señalado repetidamente que fue confirmada por el Senado con 78 votos, más que casi cualquier otro funcionario de Trump aparte del Secretario de Estado Marco Rubio, una validación de que está bien calificada para el cargo.

"Gail es una amiga de toda la vida y una experimentada abogada antimonopolio", declaró a CBS News el comisionado de la FTC, Mark Meador. "Ha sido una excelente compañera en la colaboración entre la FTC y el Departamento de Justicia para cumplir nuestra misión compartida".

Algunos de los partidarios de Slater señalaron que, a diferencia de la administración Biden, que utilizó todo el tiempo que le permitía la ley para realizar investigaciones, Slater y su equipo han cerrado voluntariamente las investigaciones en un período más corto docenas de veces.

Y se ha distanciado del enfoque del equipo antimonopolio de Biden en otros aspectos, según otra fuente. El equipo de Biden, por ejemplo, iba a recomendar bloquear la fusión de Capital One y Discover, y Slater la permitió.