Cómo el voto estratégico puede jugar un papel en estas elecciones

En su distrito electoral del área de Vancouver, el candidato del NDP, Peter Julian, está llamando a aquellos que normalmente votarían por los liberales o los verdes a que voten por él.

Afirma que los conservadores cuentan con un voto dividido y que apoyar su candidatura contribuirá a garantizar que Pierre Poilievre no tome el poder.

Lo que Juilan dice es que los simpatizantes del Partido Liberal o Verde deberían considerar el voto estratégico. Es una estrategia electoral que ya se ha empleado en elecciones anteriores y que se está volviendo a utilizar en estas elecciones federales.

Pero ¿qué es? ¿Es eficaz? CBC News lo explica.

¿Qué es la votación estratégica?

El voto estratégico ocurre cuando alguien, en lugar de votar por el partido de su elección, decide votar por otro partido para impedir que un tercero obtenga un cargo.

"Si prefiero el NDP [y] esa es mi preferencia sincera, pero voto por los liberales para frenar a los conservadores, entonces la fraseología común es que no voté sinceramente. Voté estratégicamente por los liberales para evitar que los conservadores ganaran", explicó Christopher Cochrane, profesor asociado de ciencias políticas en la Universidad de Toronto.

Pero otros ejemplos incluyen a los liberales votando por un candidato fuerte del NDP para detener a los conservadores en un distrito electoral particular si sienten que el candidato liberal no tiene posibilidades de ganar.

Además, un conservador también podría votar por un candidato del NDP para impedir que los liberales obtengan el escaño.

¿Cuáles son los desafíos de la votación estratégica?

Para que la votación estratégica sea efectiva, es necesario que exista algún tipo de información sobre las preferencias de los votantes en ese distrito electoral.

Basándonos en el historial electoral, puede que sea más fácil predecir esas preferencias en algunos distritos electorales.

Pero si bien a menudo hay una abundancia de datos de encuestas nacionales para una elección federal o datos de encuestas provinciales para una elección provincial, puede ser difícil obtener datos de encuestas para un distrito electoral específico.

Cuando existe, también suele ser menos confiable.

"Uno de los grandes desafíos de nuestro sistema electoral con el voto estratégico es que la gente a menudo mira las encuestas a nivel nacional para decidir si votar estratégicamente y cómo hacerlo, cuando lo que en última instancia importa son los resultados locales", dijo Cochrane.

Eso podría llevar a una situación, dijo Cochrane, en la que el candidato local del NDP tenga más probabilidades de vencer al candidato conservador, pero los votantes en cambio se inclinen por los liberales porque tienen más probabilidades que los conservadores de formar gobierno.

"Entonces se podría tener en ese distrito el efecto exactamente opuesto al que buscan los votantes estratégicos " .

¿Cuales son los pros y contras?

Sin duda, la ventaja del voto estratégico es que puede ayudar a evitar que el "peor escenario" que prevea un votante, es decir, que un determinado líder y partido llegue al poder.

Sin embargo, estas votaciones estratégicas también podrían tener consecuencias a largo plazo.

Si los partidarios del Nuevo Partido Demócrata abandonan el partido para votar por el Partido Liberal, el pobre resultado resultante podría significar que el NDP tenga estatus oficial de partido en el Parlamento, dejándolo gravemente subfinanciado como resultado.

"No logran difundir su mensaje. La gente deja de donarles", dijo Cochrane. "Entonces, los Nuevos Demócratas podrían dejar de existir como partido viable".

¿Qué papel juega el voto estratégico en una elección?

André Blais, profesor emérito de ciencias políticas de la Universidad de Montreal que ha estudiado el voto estratégico, dijo que las investigaciones muestran que alrededor del cinco por ciento de las personas votan estratégicamente en las elecciones canadienses.

Tal vez no sea sorprendente que quienes tienen más probabilidades de votar estratégicamente sean aquellos con preferencias electorales más débiles, dijo.

"Si te gusta el NDP pero no te gusta tanto, es más probable que consideres la posibilidad de votar por otro partido", dijo.

En la mayoría de las elecciones, dijo Blais, puede haber sólo un puñado de distritos electorales donde la votación estratégica puede cambiar el resultado.

" Sospecho que habrá muy pocos casos en los que marque la diferencia", dijo. "Lo que sí sabemos, creo, es que es muy improbable que sea decisivo en la mayoría de los distritos electorales".