PAUL WAUGH: «En Rochdale, conocemos muy bien el trauma que sufrieron las niñas a causa de las bandas de prostitución»

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En Rochdale, conocemos muy bien el terrible trauma que sufren nuestras niñas locales a manos de las malvadas bandas de secuestro.
Por eso acojo con gran satisfacción la decisión de Keir Starmer de ordenar una investigación nacional sobre este crimen enfermizo, con fuertes poderes para obligar a los testigos a prestar declaración.
El viernes tuvimos las últimas condenas de una banda de violadores de niños, formada por hombres de Rochdale, de ascendencia paquistaní, que se aprovecharon de niñas a principios de la década de 2000.
El contraste entre la valentía de las mujeres que testificaron ante el tribunal y la cobardía de sus abusadores fue marcado.
La forma en que estos pedófilos trataban a las adolescentes como esclavas para su perversión sexual era bastante repugnante.
Pero lo que también enfureció a mucha gente fue la declaración del abogado de la fiscalía ante el tribunal de que el abuso había tenido lugar "bajo las narices de los trabajadores sociales y otros que deberían haber hecho mucho más para protegerlos".
Por eso necesitamos esta investigación reglamentaria: para exigir responsabilidades a todo aquel en cualquier posición de autoridad que sabía lo que estaba pasando y no actuó.
La investigación debe ahora basarse en las pruebas, adondequiera que conduzcan. Ningún partido político, ningún concejal, ningún policía, ningún trabajador social, ningún grupo racial debe quedar al margen de la transparencia. No puede haber encubrimientos.
El Primer Ministro tiene un sólido historial a la hora de tomar medidas para encarcelar a los violadores de niños en nuestra ciudad.
Fue su decisión como Director del Ministerio Público de cambiar la forma en que se construyen los casos para los tribunales, permitiéndoles a estas chicas de clase trabajadora tener el día en el tribunal que merecían, lo que allanó el camino para una serie de procesamientos.
Y cuando la ministra del Interior, Yvette Cooper, pidió en enero que Louise Casey realizara una auditoría nacional sobre el acoso sexual, quedó claro que quería que un experto ferozmente independiente lo investigara.
Parece que los hallazgos de la baronesa Casey serán tan sensatos como todos sus trabajos anteriores.
Espero que la nueva investigación brinde ahora la justicia que se les ha negado a nuestras niñas durante tanto tiempo.
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Daily Mirror