Barletta, continúa la investigación del asesinato de Diviesti: se investiga un cabello y restos de saliva

Se ha programado una investigación técnica irrepetible para el próximo 1 de julio a las 9:00 h en la investigación del asesinato de Francesco Diviesti, el peluquero de 26 años de Barletta, que desapareció el pasado 25 de abril y fue encontrado muerto cuatro días después. El cuerpo semicarbonizado del joven, con señales de heridas de bala, se encontraba en una ruina en la campiña entre Canosa di Puglia y Minervino Murge, al norte de Bari.

Fue el abogado de uno de los cinco sospechosos quien solicitó la diligencia de prueba, ordenada por la Dirección Antimafia del Distrito de Bari, que coordina las investigaciones de los agentes de la Brigada Móvil de la Jefatura de Policía de Andria, y que ha abierto un expediente por homicidio agravado por la mafia. Los sospechosos son un albanés de 40 años, residente en Barletta; un hombre de 57 años y su hijo de 21 años; un hombre de 25 años de Barletta y un hombre de 55 años de Minervino Murge, este último propietario de una villa cercana a las ruinas donde se encontró el cuerpo, que terminó bajo embargo.

El próximo martes se realizarán pruebas irrepetibles a los rastros biológicos encontrados en las pruebas incautadas en la escena del crimen y en un vehículo. Estas incluirán la comparación de rastros de sangre, algunos cartuchos, un cabello y saliva, entre el ADN de la víctima y el de los sospechosos. Según lo que se ha revelado hasta el momento de las investigaciones, no se puede descartar que el joven de 26 años recibiera varios disparos antes de que su cuerpo fuera incendiado. Esta hipótesis también se ve respaldada por el hallazgo de varios cartuchos atribuibles a dos pistolas de diferentes calibres en las ruinas donde se encontró el cuerpo semicarbonizado de la víctima.

Los investigadores también indagan en una pelea en la que el joven de 26 años presuntamente estuvo involucrado unas horas antes de su desaparición, y en la que también habrían participado dos de los investigados de Barletta, ya conocidos por la policía. El joven de 26 años, sin antecedentes penales, salió de su casa alrededor de las 20:30 h de la noche del 25 de abril y luego entró en el lugar donde trabajaba con su padre en el centro de Barletta alrededor de la medianoche, dejando su scooter. Las imágenes grabadas por los sistemas de videovigilancia de la zona dan fe de ello. «De forma confidencial y absolutamente privada, los padres de Francesco —declara el defensor legal de la familia, Michele Cianci— se encargaron del entierro de su hijo».