El Lecce dispuesto a jugarlo todo: o hace historia o es B

LECCE - El último partido de la temporada, aquel en el que o se hará historia o volveremos a casa con la decepción del descenso en el corazón, para escribir nuestro nombre con letras mayúsculas en los anales del club. Tres jugadores giallorossi podrían tener esta oportunidad en el partido de mañana contra la Lazio, aunque, hasta el momento, no han conseguido dejar una señal tangible de su presencia en el viaje realizado con el equipo del Salento.
Los jugadores en cuestión son Jesper Karlsson, cedido por el Bolonia a principios de enero, Konan N'Dri, fichado de forma permanente al final del mercado de fichajes procedente del OH Leuven, y Lameck Banda, en su tercera temporada con los Giallorossi, durante la cual estuvo mucho tiempo apartado de los terrenos de juego por lesiones.
En el Olímpico, uno de los tres empezará por la izquierda en sustitución del sancionado Tete Morente, mientras que los otros dos podrían entrar, ya que los extremos "altos", a los que Marco Giampaolo pide subir y bajar para asegurar su aportación en la fase de no posesión, suelen ser sustituidos durante el partido porque están sujetos a un gasto de energía considerable.
Ninguno de ellos ha dado a los fans una verdadera alegría hasta ahora. Quizás porque, en los casos del sueco y el marfileño, no es fácil llegar en enero y encajar perfectamente, subvirtiendo las jerarquías existentes. Quizás porque, para el zambiano, es complicado volver al campo después de un largo descanso y encontrar las mejores condiciones si sólo se juegan fragmentos del partido.
Si tienen algo que arrojar en la balanza sobre el rendimiento de su temporada competitiva, sin embargo, ha llegado el momento de hacerlo, tratando de pasar a la historia del club de Via Colonel Costadura como aquel Gaetano Vasari que, en el 2000/2001, llegado al Salento en enero y utilizado escasamente por Alberto Cavasin, dio la permanencia al Lecce, siendo titular y marcando un doblete en el partido decisivo disputado contra la Lazio, en la «Via del Mare», en la última jornada.
Karlsson jugó 12 partidos con los Giallorossi. Fue parte del once inicial ante Parma, Fiorentina, Roma, Atalanta y Napoli, mientras que entró como suplente en el minuto 1 del segundo tiempo ante Udinese y Genoa. En total, jugó 436 minutos, permaneciendo en el banquillo en 7 partidos. Sólo trajo alegría al Bérgamo, en el partido posterior a la muerte del fisioterapeuta Graziano Fiorita, convirtiendo el penalti que permitió al Lecce ponerse momentáneamente en ventaja, antes de verse alcanzado por el 1-1. Por lo demás, concedió algunas jugadas que dejaron entrever sus cualidades, pero de forma demasiado intermitente y con poca determinación competitiva. Ante la Lazio, parece el candidato más probable para ocupar el puesto de Morente. ¿Será capaz de encontrar la energía para vivir un domingo que pueda transmitirse a la posteridad?
N'Dri cuenta con 8 apariciones. Giampaolo confió en él desde el primer minuto sólo contra el Verona y el Turín, y lo llamó a la acción inmediatamente después del descanso contra el Genoa. Dispuso de entre 30 y 36 minutos contra Roma, Venecia, Juventus y Como, además de algunos partidos contra Bolonia, Monza, Udinese y Nápoles. En total 299'. Remató a un poste interior que todavía clama venganza en el choque directo en casa ante los venecianos dirigidos por Eusebio Di Francesco. Demostró que sabía alejarse del rival en situaciones de uno contra uno, pero luego perdió el rumbo a la hora de tomar la decisión final. Es de suponer que en el Olímpico tendrá alguna oportunidad al menos en la segunda mitad y será él quien tenga que encauzar sus cualidades en la dirección adecuada.
Banda comenzó la temporada tras recuperarse de la cirugía que le hizo perderse la fase final del torneo 2023/2024. Luca Gotti lo utilizó en 10 de 12 desafíos, pero el zambiano nunca estuvo en su mejor momento. El Lecce lo perdió desde la decimotercera hasta la vigésimo sexta jornada porque se vio obligado a recurrir de nuevo a un cirujano. Estuvo disponible nuevamente a partir de la vigésimo séptima jornada. Jugó 8' contra Milán y Génova, 32' contra Roma y Como, 35' contra Verona. Pero nunca ha alcanzado estándares aceptables. Sin embargo, el futbolista en gran forma admirado en la primera parte del año pasado podría garantizar una valiosa contribución a la causa del equipo del Salento. Mañana por la noche (inicio a las 20:45) podría ser una carta para jugar al final del partido si hubiera necesidad y quién sabe, tal vez encuentre la inspiración adecuada para hacer realidad el sueño de todo un pueblo.
La Gazzetta del Mezzogiorno