Occhiuto en el trabajo tras la investigación. Sin citación a la fiscalía.

Una breve historia, muda, sin audio, que lo muestra en una reunión en el Ministerio de Finanzas para hablar sobre el debilitado sistema sanitario calabrés, aún bajo administración especial. Tras la notificación de la investigación que él mismo anunció haber recibido, el presidente de la Región de Calabria, Roberto Occhiuto , vuelve a recurrir a las redes sociales para decir, o mejor dicho, dar a entender, que la investigación en su contra no lo ha distraído . Claro que, admitió, no está tranquilo. "Tranquilo como un demonio, porque estar inscrito en el registro de sospechosos —también para mi protección, según me dicen— es una vergüenza para mí: es como si me hubieran acusado de asesinato", declaró en el vídeo de anoche.
La fiscalía, dirigida por Salvatore Curcio, no parece tener prisa por escucharlo en este momento, tal como lo solicitó. Aún no se ha emitido ninguna citación. Todo el partido Forza Italia se alinea con el presidente de la Región de Calabria, empezando por Antonio Tajani , quien pone en duda una supuesta "justicia de relojería" y subraya: "Asociar la corrupción con Occhiuto me parece ridículo; al final, incluso los magistrados se darán cuenta de que esta iniciativa es infundada". El diputado Francesco Cannizzaro se atreve: "Investigar a Roberto Occhiuto por corrupción es como investigar al presidente de la República por difamación de la bandera". La compañera del gobernador, la subsecretaria Matilde Siracusano , también miembro de Forza Italia, guarda silencio por el momento, y su secretario, Paolo Posteraro , se encuentra entre los investigados.
La Repubblica