Marina desmantela narcocampamentos de Los Chapitos en Sinaloa

La Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) asestó un nuevo golpe al Cártel de Sinaloa, específicamente a la facción conocida como Los Chapitos, al desmantelar varios narcocampamentos en los municipios de Concordia y San Ignacio, en el estado de Sinaloa. Durante las operaciones, las autoridades aseguraron un amplio arsenal bélico, explosivos improvisados, droga y equipo táctico que presuntamente pertenecía a esta célula delictiva.
Las acciones se enmarcaron en las operaciones Sable y Chipahua, desplegadas por la Cuarta Región Naval como parte de los esfuerzos de vigilancia y combate al crimen organizado. Durante recorridos terrestres realizados en zonas rurales, los elementos de Marina encontraron casas abandonadas y puestos de observación que eran utilizados como bases operativas por integrantes del grupo criminal.
En Concordia, específicamente en el poblado de Pánuco, los infantes de Marina aseguraron estructuras abandonadas que funcionaban como puntos de vigilancia. Ahí localizaron armas de fuego, explosivos y motocicletas, así como munición de alto calibre y equipo táctico. La Marina informó que, entre lo asegurado, destacan:
- 32 artefactos explosivos improvisados
- 100 detonadores
- 68 explosivos tipo emulgel
- 11 bultos y 563 envoltorios de marihuana
- 2 armas largas
- 2,666 cartuchos útiles
- 23 cargadores
- 4 motocicletas
En una segunda operación, realizada en el poblado de San Juan, en el municipio de San Ignacio, las fuerzas armadas inutilizaron tres narcocampamentos abandonados, presuntamente también utilizados por Los Chapitos. En estos puntos, los elementos de la Marina encontraron un nuevo arsenal, incluyendo:
- 80 artefactos explosivos improvisados
- Un arma larga
- 2,182 cartuchos de diferentes calibres
- 37 cargadores
- Equipo táctico militar
Las autoridades no reportaron detenidos, ya que las estructuras se encontraban abandonadas al momento del operativo. Sin embargo, señalaron que estos hallazgos son evidencia clara del tipo de infraestructura logística y militar que mantiene el cártel en las zonas serranas de Sinaloa.
Los decomisos de explosivos artesanales, armas y drogas subrayan el nivel de sofisticación bélica que algunos grupos del crimen organizado han alcanzado en México. Según expertos en seguridad, el uso de artefactos explosivos improvisados (IEDs) representa una tendencia preocupante, pues no solo se emplean para enfrentamientos entre grupos rivales, sino también como herramientas para resistir acciones del Estado.
La presencia de puestos de observación y equipo táctico sugiere una estrategia defensiva que busca anticipar la llegada de fuerzas federales. Además, el hallazgo de motocicletas refuerza la hipótesis de que estos narcocampamentos mantenían vigilancia constante y capacidad de escape rápido.
La Secretaría de Marina reafirmó su compromiso con el combate a la delincuencia organizada y señaló que continuará realizando operativos en zonas de difícil acceso, donde estos grupos han establecido refugios estratégicos. Asimismo, informó que todo el material asegurado fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) para iniciar las investigaciones correspondientes.
Aunque estos golpes no eliminan por completo las capacidades del grupo criminal, sí representan un desmantelamiento parcial de su infraestructura, debilitando su presencia territorial en las zonas montañosas.
Las recientes operaciones de la Marina en Sinaloa muestran el esfuerzo coordinado por desarticular los bastiones operativos del Cártel de Sinaloa, en especial de Los Chapitos, considerados una de las facciones más activas y peligrosas del país. El aseguramiento de explosivos, armas y droga confirma la creciente militarización del crimen organizado y la necesidad de mantener presencia federal en estas regiones clave.
La Verdad Yucatán