Miedo a ICE paraliza La Villita: Despensas de comida luchan por ayudar

Un clima de miedo se ha apoderado de los barrios inmigrantes de Chicago como La Villita (Little Village). El temor a las redadas de ICE ha provocado que las familias se encierren en sus casas, dejando calles comerciales vacías y creando una crisis para las despensas de alimentos.

CHICAGO, IL – Las vibrantes calles de La Villita, el corazón de la comunidad mexicana en Chicago, lucen como pueblos fantasma. Un profundo temor a las operaciones de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha obligado a miles de residentes, muchos de ellos indocumentados, a permanecer encerrados, creando una crisis silenciosa que está paralizando la economía local y poniendo en jaque a las organizaciones de ayuda humanitaria.

Organizaciones sin fines de lucro como la Despensa de Alimentos de Pilsen (Pilsen Food Pantry) y New Life Centers reportan una caída drástica en el número de personas que acuden a sus instalaciones. Un voluntario de la despensa de Pilsen afirmó que sus números de atención presencial se han reducido a la mitad en la última semana, ya que las familias tienen miedo de salir a la calle.

Este fenómeno se intensificó después de que ICE lanzara la «Operación Safeguard», una serie de «operaciones selectivas mejoradas» en Chicago que resultaron en más de 100 arrestos a principios de mes. Activistas locales han reportado un aumento en la presencia de agentes de ICE en barrios como La Villita y Pilsen, a veces en vehículos sin marcar, lo que ha elevado el nivel de alerta y pánico.

Una Crisis de Hambre y Aislamiento

La situación ha obligado a las organizaciones a cambiar de estrategia. Ante el miedo de la comunidad, ahora enfrentan el desafío logístico de llevar la comida directamente a los hogares de quienes no se atreven a salir.

* Llamado a Voluntarios: Las despensas están haciendo un llamado urgente para conseguir más voluntarios que puedan realizar entregas a domicilio y así garantizar que las familias, especialmente aquellas con personas médicamente vulnerables, no se queden sin alimentos.

* Amenazas y Resistencia: La Despensa de Alimentos de Pilsen ha denunciado haber recibido mensajes de odio y amenazas por su apoyo a la comunidad inmigrante. Sin embargo, han reafirmado su compromiso, declarando: «¡No nos vamos a ninguna parte!… Nos mantenemos firmes con todos los migrantes y resistimos la odiosa ignorancia xenófoba de la oposición».

> «Es muy real… estamos contactando a las familias, especialmente a las que son médicamente vulnerables en este momento, tratando de asegurarnos de que reciban la comida que necesitan. De repente, descubrir que no puedes conseguir comida, creo que es una tragedia.» – Voluntario de la Despensa de Alimentos de Pilsen.

>

El Impacto en los Nuevos Migrantes

La crisis afecta no solo a los residentes de larga data, sino también a las decenas de miles de nuevos migrantes, en su mayoría venezolanos, que han llegado a Chicago desde 2022. Muchos de ellos dependen de comedores comunitarios y despensas para sobrevivir.

Recientemente, El Comedor Comunitario, una cocina comunitaria autogestionada por y para migrantes en el barrio de Bridgeport, enfrentó una orden de desalojo, agravando la inseguridad alimentaria y de vivienda para cientos de personas.

El miedo a la deportación está creando una crisis humanitaria invisible en Chicago. Mientras la política migratoria se debate en los más altos niveles, en las calles de La Villita y Pilsen, la consecuencia más inmediata es el hambre y el aislamiento de las comunidades más vulnerables de la ciudad.