Nuevo dorsal, distinto Mbappé: "No sé si será el número 10, pero quiere más y se nota"

Kylian Mbappé estrenó la nueva temporada liguera como terminó la anterior: marcando y siendo decisivo. Pero eso sí, lo hizo con una versión un poco diferente. El francés ha cambiado el dorsal nueve por el diez y con esa modificación parece que su fútbol también se ha transformado. "No sé si es por el número, pero sientes que quiere más. Tiene ambición y quiere inspirar a los demás. Se notan sus ganas", aseguró Xabi Alonso, encantado, en sala de prensa.

Después de sufrir una gastroenteritis aguda durante el Mundial de clubes que le obligó a perderse varios partidos y le provocó una pequeña pérdida de peso durante el torneo, el delantero ha empezado el curso en una de las mejores formas físicas que se le recuerdan. Ya ante el Tirol ofreció una buena versión, pero ante Osasuna fue el mejor: ágil en el regate corto, potente y veloz en la zancada, líder en la comunicación con sus compañeros y decisivo para provocar y marcar el penalti que dio el primer triunfo liguero al Madrid.

El '10', número que también lleva en la selección francesa, parece haberle dado más peso. "Ha generado esas jugadas diferentes y después de un primer año en el que hizo cosas buenas, quiere más", añadió Alonso.

En la estadística de regate está uno de los ejemplos. Mbappé es ahora el líder de ese apartado en toda la Liga. Intentó irse de su marcador en 12 ocasiones y lo consiguió en ocho, superando por uno los siete regates de Lamine Yamal contra el Mallorca y de Nico Williams contra el Sevilla.

Una cifra que supera el récord del Madrid la temporada pasada, obra de Vinicius con siete. El brasileño, sin embargo, volvió a dejar una actuación alejada de su máximo nivel ante Osasuna. Apenas regateó una vez a su par y terminó siendo sustituido en el tramo final del encuentro.

En el caso de Mbappé, uno de esos regates fue el previo a la acción del penalti que decidió el partido, otro ejemplo de su buena y amplia actuación. El francés se alejó del área durante todo el choque y se movió por todo el frente de ataque, liberado sin Bellingham, con el que a veces se pisaba en la mediapunta.

La importancia de las "distancias" en las que insiste cada día Xabi Alonso se vio en las posiciones del galo ante Osasuna. Siempre dando una opción de pase a sus compañeros y siempre aprovechando los huecos libres en el ataque, ya sea por izquierda, por derecha o por el centro. Cayendo a la banda diestra surgió su arrancada antes del penalti, imparable para los defensas.

"Me siento muy bien, pero lo más importante siempre es dar una ayuda al equipo ofensivamente y defensivamente. Lo demás va a pasar, Si tengo un buen espíritu de ayudar al equipo, vamos a ganar partidos", explicó Mbappé tras el duelo.

En una versión, salvando las distancias, más parecida a la de su compatriota Benzema que a la de un rematador nato, el francés se ofreció constantemente, una orden clara que llegaba desde el banquillo. Xabi le quería cerca de la pelota y no en el área: "Quería que tuviéramos mucho control en el balón, que jugáramos de un lado a otro para que el otro equipo corra y tengamos espacios para jugar. Hay cosas que podemos mejorar porque acabamos de volver de vacaciones, pero es positivo", aseguró Kylian.

42 pases, 73 toques de balón, seis disparos... Y el '10' a la espalda. "Es un número importante aquí, aunque el nueve también lo era, pero es especial marcar con el 10. Lo más importante es jugar en el Bernabéu con el Madrid", declaró sobre su dorsal, un cambio que pidió cuando se anunció la salida definitiva de Luka Modric y con el que el club ha estado de acuerdo desde el principio. El dorsal, icónico en Chamartín, cuadra a la perfección con la confianza de la directiva en el futuro de Mbappé, convertido ya en máxima estrella del equipo después de su Bota de Oro.

Tras marcar 44 goles en 58 partidos, el francés busca ahora superar la barrera de los 50 y, especialmente, liderar al Madrid hacia la conquista de un título importante. De momento, el delantero sólo ha ganado la Supercopa de Europa y la Intercontinental, y la pelea por la Liga y la Champions decidirán si su liderazgo es o no el apropiado para esta nueva etapa madridista con Xabi Alonso en el banquillo.