Lo que un médico advierte sobre caminar con los zapatos en casa: "Microplásticos, bacterias, heces, virus, pesticidas, orina..."
Aunque no es una costumbre ni mucho menos extendida en España, lo cierto es que descalzarse al llegar a casa va mucho más allá de una manía o un gesto cultural. Si dejamos los zapatos de la calle en la entrada, y cambiamos de calzado, limpio y cómodo, estaremos en realidad llevando a cabo un gesto de higiene que quizá no hayamos considerado nunca.
Según los expertos, las suelas que han pisado las calles durante la jornada, contienen una serie de bacterias de todo tipo que, una vez han paseado por la casa, van a comprometer la salud de los que viven en ella. Esta es la razón por la que es imprescindible descalzarse, y no sólo una moda.
Caminar en el hogar con el mismo calzado con el que hemos recorridos las calles, las aceras, los baños públicos, los parques con animales… no es lo más higiénico, de ninguna manera.
Numerosos estudios han detectado que en la suela de los zapatos transportamos desde la bacteria E. Coli, hasta restos de carburantes tóxicos, hongos, microorganismos y todo tipo de residuos que, de entrar en contacto con las mucosas, podrían desencadenar una infección y más de una enfermedad.
En palabras del doctor José Manuel Felices, que publica un vídeo en sus redes sociales argumentando por qué es tan beneficioso quitarse los zapatos en casa, de la calle traemos "microplásticos, bacterias, heces, virus, pesticidas, metales pesados, tabaco, orina… Deberíamos tomárnoslo en serio y proteger nuestras casas de este tipo de organismos nocivos y tóxicos de todo tipo".
Aparte de las ventajas que señalan los podólogos respecto a caminar descalzos o con zapatillas de estar en casa, para que el pie vuelva a su posición natural después de un duro día de actividad, hay otras que tienen que ver directamente con nuestra salud inmediata.
Dejar los zapatos a la entrada "reduce la propagación de patógenos y productos químicos; y la casa resulta mucho más fácil de barrer y fregar, puesto que el suelo y las alfombras no se habrán ensuciado tanto". Además, evitar que 'entren' por toda la casa estas sustancias contribuye también "a que mejoren tu alergia y tu respiración: se reduce el polvo, el polen y el moho, relacionados con las alergias", dice el doctor.
Pero es que, descalzarse en casa, "fortalece tu pisada: trabaja los músculos del pie y permite que funcione de manera más natural, sin la presión del calzado. Otro argumento a favor es que descalzarnos evita tener hongos: facilita la sudoración del pie, reduciendo la posibilidad de que aparezcan". Así pues, quitarse los zapatos es un gesto sencillo que interesa a toda la familia, y que mantiene la higiene del hogar en mejor forma.
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