Claves para descansar y dormir mejor en el avión

Aunque seas un viajero con mucha experiencia, los vuelos largos, de varias horas, resultan cansadores.

Las ganas de dormir encuentran fácilmente obstáculos: desde el asiento que suele ser incómodo para rutas de larga distancia hasta distracciones típicas de un viaje como vecinos molestos o turbulencias que te mantienen alerta.

Lógicamente, un ticket para una clase superior como Business ayuda para tener un asiento mucho más cómodo. Pero veamos algunas otras cosas más cercanas y menos onerosas que podés poner en práctica en tus próximos vuelos de larga distancia.

Antes de pasar a la elección del asiento, ante un viaje largo, es importante priorizar vuelos directos o lo más directos posible.

Dicho esto, a la hora de sentarse, hay que decirlo: acá juega fuerte el team ventana vs. team pasillo, pero también el costo extra que puede implicar la elección de un asiento y hasta dónde el viajero esté dispuesto a pagar: recordemos que en muchos casos, al hacer el check in y elegir asiento, hay determinadas ubicaciones que requieren un pago extra.

Entre las elecciones, hay quienes prefieren la ventanilla para tener dónde apoyarse mientras duermen; otros quieren asientos más alejados de la cocina o los baños para evitar el ruido de la gente.

Los de pasillo son ideales para los que necesitan levantarse con mayor asiduidad (y no les molesta que su compañero de turno le pida pasar cada tanto).

Prestar atención también a los asientos que por su ubicación no se reclinan.

A quienes tienen miedo a volar se les recomiendan asientos de la mitad hacia adelante ya que las turbulencias se sienten más en las zonas traseras.

Priorizar comodidad por sobre el estilo y el glamour. Hay que estar sentado durante mucho tiempo y moviéndose en un espacio reducido por lo que lo mejor es usar ropa cómoda.

"Evita ropa estrecha, tacones o cualquier prenda incómoda que dificulte tu relax. Elige ropa amplia, de algodón si es posible, y que te deje libertad de movimientos. Lo más parecido a un pijama, vamos", sugieren en Iberia..

También en capas: a bordo, la temperatura puede variar mucho entre el frío y el calor.

Un tip vinculado a la comodidad: evitar cruzar las piernas. Mantenerlas cruzadas durante mucho tiempo puede dificultar la circulación y puede generar hormigueos molestos.

Conviene extender ambas piernas hacia adelante y mantener las rodillas ligeramente flexionadas.

En relación con el punto anterior, al momento de armar el bolso de mano, tener en cuenta cosas que a bordo te cambiarán la experiencia: almohadas para el cuello, auriculares (especialmente los noise cancelling que bloquean ruidos molestos) y antifaces.

Cosas útiles y que no ocupan mucho espacio.

En la previa al vuelo conviene evitar bebidas con cafeína justo antes del vuelo.

Si hay ciertos alimentos o bebidas, como las alcohólicas, que dificultan la normalidad del sueño.

Conviene evitarlos frente a un vuelo largo (antes y durante).

"Es muy tentador tomar un café en el aeropuerto mientras esperamos a embarcar, pero si tu intención es dormir en el avión, evítalo o cámbialo por una infusión o por un café sin cafeína. Deja que transcurran al menos seis horas entre el último que te has tomado y el vuelo", sugieren en Iberia.

Agregan: "Lo mismo te decimos del alcohol: aunque en un primer momento pueda causar somnolencia, es un excitante que no ayudará en nada a tu propósito. En cuanto a las comidas, procura que sean ligeras y frescas: nada de picantes, salsas- o grasas- que podrían provocar digestiones pesadas o molestias".

Importante: mantenerse muy hidratado.

"La recirculación del aire en los aviones puede causar deshidratación que altera el sueño", dice Elina Winnel, fundadora de My Sleep Coach y experta internacional en sueño. Recomienda beber mucha agua antes del vuelo, en lugar de durante, para evitar tener que levantarse constantemente para ir al baño.

Cuando sientas que es tu hora de empezar a relajar e intentar dormir, será importante sostener, en lo posible, la rutina de sueño habitual: meditación, estiramientos, evitar el exceso de luces de celular. Y pasar por el baño antes de dormir.

Winnel también recomienda hacer ejercicio físico el día previo al vuelo para cansar el cuerpo.

Si planeás dormir y que nada ni nadie te moleste, es muy importante que lo hagas con el cinturón abrochado y visible. De este modo, frente a un evento de turbulencia, la tripulación no necesitará despertarte para pedirte que ajustes el cinturón.