La ciudad que vetó a Ozzy Osbourne de por vida por "deshonrar" un monumento histórico

El mundo del heavy metal recibía ayer con tristeza la noticia de la muerte de Ozzy Osbourne, cantante de Black Sabbath. Conocido popularmente como el Príncipe de las Tinieblas, era una de las estrellas más emblemáticas de este género musical, estando siempre a la vanguardia. Apenas unos días antes, el artista de 76 años había dado su último show, un gran concierto homenaje en Birmingham que se ha convertido en su despedida.
La vida de Ozzy estuvo marcada por momentos de lo más variopintos, desde pasar seis semanas en prisión por no pagar una multa por robar a los 15 años hasta morder un murciélago muerto en pleno concierto, pasando por protagonizar su propio reality show de la MTV, The Osbournes, donde mostraba su vida junto a su esposa y sus hijos.
Por supuesto, el cantante no estuvo exento de polémicas. Por ejemplo, una mala elección en el lugar donde vaciar su vejiga le costó el veto de por vida a una ciudad. Todo se remonta al 19 de febrero de 1982, cuando un Ozzy completamente borracho no tuvo mejor idea que orinar en un monumento funerario: el cenotafio de El Álamo, en la ciudad de San Antonio, Texas.
El Álamo es un lugar histórico de gran importancia para el estado texano. Se trata de una antigua fortaleza construida por los españoles en el siglo XVIII para la conversión de los nativos indígenas al cristianismo. En 1836 fue el escenario de la Batalla de El Álamo, un conflicto militar en el contexto de la Revolución de Texas que enfrentó al ejército de México contra una milicia de secesionistas texanos. Así, El Álamo se convirtió en "una inspiración y motivación para la libertad durante la Independencia de Texas", tal y como señalan desde su web.
A día de hoy, se ha transformado en un interesante punto turístico, donde se presentan exposiciones interactivas y representaciones en vivo de la Revolución de Texas. Aquí podremos pasear por el complejo de 16.000 metros cuadrados y por los jardines Alamo Gardens, para después bajar al Paseo del Río, lleno de tiendas, restaurantes y opciones de ocio y entretenimiento.

Tras el incidente urinario, Ozzy Osbourne fue arrestado y encarcelado brevemente en el Bexar County Adult Detention Center, hasta que fue puesto en libertad bajo fianza de 40 dólares, pudiendo llegar a tiempo a su concierto en el HemisFair Arena. Eso sí, se llevó como souvenir un veto de por vida a la ciudad.
Sin embargo, a pesar del castigo, 33 años después el artista finalmente pudo regresar a la ciudad. Fue en 2015, con el propósito de grabar parte de un documental para History Channel junto a su hijo Jack Osbourne. El vocalista de Black Sabbath se mostró muy arrepentido, y es que sus disculpas eran reiteradas desde hacía años. De hecho, había donado 10 mil dólares a las Hijas de la República de Texas, una organización dedicada a preservar el valor histórico de El Álamo.
Ahora, ante la muerte del cantante, desde El Álamo han mostrado sus condolencias. "Su relación con El Álamo se vio marcada inicialmente por un incidente irrespetuoso ocurrido en 1982. Este acto molestó profundamente y con razón a muchos de los que consideran este lugar sagrado. Sin embargo, la redención y la reconciliación acabaron formando parte también de su historia. En 1992, Ozzy se disculpó personalmente ante el entonces alcalde Nelson Wolff y expresó un arrepentimiento sincero por sus actos. Décadas más tarde, en 2015, volvió a visitar el recinto del Álamo para conocer y apreciar la profunda historia del lugar, demostrando abiertamente humildad y comprensión", publicaron en su perfil de Instagram.
20minutos