S&P sobre el débil crecimiento del PIB: podría complicar la adopción del euro

El crecimiento persistentemente débil del PIB de los países de la región de Europa central y oriental puede complicar sus planes de consolidación fiscal, especialmente donde las perspectivas fiscales ya son sombrías debido, entre otras cosas, a las generosas transferencias y al gasto de defensa, señaló S&P Global Ratings en un informe publicado el lunes.

El crecimiento del PIB en la mayoría de las economías de Europa Central y Oriental se desaceleró en el primer semestre de 2025 debido a la incertidumbre que afecta la confianza de los consumidores y las empresas, la lenta absorción de los fondos de la UE y la persistente debilidad de la economía alemana. Es probable que la persistencia de un crecimiento débil complique los planes de consolidación fiscal de los gobiernos de Europa Central y Oriental, que ya enfrentan una de las perspectivas fiscales más débiles de la región EMEA (debido a las generosas transferencias sociales y al aumento del gasto en defensa) y a las complicaciones derivadas de los ciclos electorales y un panorama político fragmentado, escribió S&P en el informe.
La mayoría de las calificaciones soberanas de Europa Central y Oriental tienen perspectivas estables, lo que refleja nuestras expectativas de crecimiento del PIB a mediano plazo, riesgos limitados para la balanza de pagos, una desinflación gradual, una flexibilización monetaria cautelosa y una deuda pública moderada. Sin embargo, la incertidumbre comercial y geopolítica global está empeorando las perspectivas para los países de Europa Central y Oriental. Los resultados de las negociaciones comerciales entre EE. UU. y la UE siguen siendo inciertos, y la intensidad del conflicto entre Rusia y Ucrania sigue siendo alta, añade el informe.
La tabla incluida en el informe muestra que S&P prevé un crecimiento del PIB para Polonia en 2025 del 3,3% y en 2026 del 3,1%, y un saldo del gobierno general del -6,2% del PIB y del -5,2% del PIB, respectivamente, con una deuda sectorial del 60,2% del PIB y del 63,7% del PIB.
De las tres agencias de calificación crediticia más importantes, Moody's otorga la calificación crediticia más alta de Polonia, "A2". La calificación de Polonia, según Fitch y S&P, es "A-", un nivel por debajo de la de Moody's. La perspectiva para todas las calificaciones es estable. (PAP Biznes)
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