<![CDATA[ Presidente da República condena discurso racista ]]>

En la tierra donde existió el primer mercado de esclavos, el presidente de la República retrocedió en el tiempo el martes para recordar los casi 900 años de nuestra patria común y explicar la mezcla de la que están hechos los portugueses. Marcelo Rebelo de Sousa aprovechó su último discurso en el Día de Portugal, en Lagos, para expresar su orgullo por quienes construyeron Portugal, provenientes de todas partes: griegos, fenicios, romanos, alemanes, nórdicos, judíos, moros, africanos, latinoamericanos y orientales. Un mensaje claro de condena al discurso de odio y al racismo.

Y desde las raíces, lusitanos, lioneses, borgoñones, galos, sajones, los aliados políticos más antiguos. Recordando a estos y a muchos otros que nos unieron, de una mezcla que nadie puede decir que es más pura y más portuguesa que ninguna otra», añadió el Jefe de Estado.

El día era de los portugueses y de las comunidades y por ello Marcelo destacó que en el pasado, Lagos “albergó los astilleros del futuro y el mercado de esclavos” y ahora “los emigrantes que vuelven a su tierra se cruzan con residentes europeos, de América, África y Asia”.

En la misma línea, Lídia Jorge, escritora y presidenta del Comité Organizador de las Celebraciones del 10 de Junio, advirtió contra los dementes en el poder y la furia revisionista que ataca a los extremos, en un discurso en el que condenó el racismo, la esclavitud y la cultura de la mediocridad. «Esto significa que aquí nadie es de sangre pura y que la falacia de una única ascendencia no se corresponde con la realidad. Cada uno de nosotros es una suma de lo nativo y lo migrante, lo europeo y lo africano, lo blanco, lo negro y todos los demás colores humanos. Somos descendientes del esclavo y del amo que lo esclavizó», dijo la Consejera de Estado.

Y ADEMÁS

Caminar por la avenida

Tras los discursos y el desfile militar, el Presidente de la República saludó a un grupo de veteranos y caminó unos dos kilómetros junto al Presidente de la Asamblea de la República, José Pedro Aguiar-Branco, antes del almuerzo. El Primer Ministro, Luís Montenegro, prefirió ir en coche.

Primer ministro

Luís Montenegro dijo que quiere que “el Estado sirva de base para que cada uno sea lo que quiera, sin interferencias ni dirección ideológica”.