Lula dice que guerra arancelaria contra EEUU sólo comenzará cuando responda a Trump

El presidente Luis Inácio Lula da Silva (PT) dijo este lunes (21), en Chile , que Brasil sólo entrará en una guerra comercial con Estados Unidos cuando responda a la decisión de su homólogo estadounidense, Donald Trump, de imponer un arancel del 50% a los productos brasileños a partir del 1 de agosto.
No estamos en una guerra arancelaria. La guerra arancelaria comenzará en el momento en que le dé una respuesta a Trump, si no cambia de opinión. Las posturas no fueron las adecuadas. Nadie puede amenazar una decisión judicial. ¿Quién soy yo para tomar una decisión ante la Corte Suprema?, dijo el presidente.

El brasileño participó el lunes en Santiago en una reunión en defensa de la democracia organizada por su homólogo chileno, Gabriel Boric. También asistieron los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y Uruguay, Yamandú Orsi, y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
El viaje de Lula se produce en un contexto de crisis entre Brasil y Estados Unidos , bajo la presidencia de Donald Trump , y amenazas de más aranceles a los productos brasileños.
Al salir del evento, Lula declaró a la prensa que estaba tranquilo respecto al incidente con Trump y que la iniciativa para bloquear los aranceles debía provenir no solo del gobierno, sino también de los líderes empresariales, quienes debían intentar convencer a sus homólogos estadounidenses de que los sobrecargos perjudican a ambos países. También afirmó que las leyes se aplican tanto a las empresas brasileñas como a las estadounidenses.
En su discurso en el evento, el presidente afirmó que los gobiernos y la sociedad necesitan actuar juntos en un momento en que "el extremismo está intentando recrear prácticas intervencionistas".
"Defender la democracia no es responsabilidad exclusiva de los gobiernos. Requiere la participación activa de la academia, los parlamentos, la sociedad civil, los medios de comunicación y el sector privado", declaró Lula. "En un momento en que el extremismo intenta revivir prácticas intervencionistas , necesitamos actuar juntos".
Según el presidente, “sin un nuevo modelo de desarrollo, la democracia seguirá amenazada por quienes anteponen sus intereses económicos a los intereses de la sociedad y del país”.
En su carta final, los presidentes se comprometieron a consolidar una red de países y de la sociedad civil para promover mecanismos participativos que fomenten el aprendizaje mutuo y la construcción colectiva de una democracia más abierta e inclusiva.
uol