Se ha detectado una catástrofe global inminente en el océano

Los océanos del mundo están en peores condiciones de lo que se creía. Un nuevo estudio a gran escala realizado por científicos del Reino Unido y Estados Unidos ha demostrado que el nivel de acidez del agua de mar ya ha superado el límite planetario: la línea más allá de la cual los sistemas naturales pierden su capacidad para mantener la estabilidad de los ecosistemas. Esto significa que el proceso de acidificación de los océanos ha ido demasiado lejos y ya amenaza la existencia de la vida marina. El estudio se publicó en la revista Global Change Biology.

La acidificación ocurre cuando el océano absorbe dióxido de carbono de la atmósfera. El CO₂ reacciona con el agua para formar ácido carbónico, provocando una disminución del pH. Esto altera el equilibrio químico y destruye las conchas de los organismos marinos, desde corales y ostras hasta moluscos microscópicos conocidos como "mariposas marinas". Las consecuencias incluyen el debilitamiento de las defensas, la disminución de la natalidad y la muerte de animales.

El estudio reveló que, para 2020, el estado promedio del océano ya se había acercado a un umbral peligroso: el contenido de carbonato de calcio en el agua había disminuido en más de un 20 % en comparación con la era preindustrial. A una profundidad de 200 metros, el nivel crítico ya se ha superado en el 60 % de las aguas globales, y es allí donde habitan la mayoría de las especies de flora y fauna marinas.

No sólo los arrecifes de coral tropicales están amenazados, sino también los ecosistemas de aguas profundas, hogar de una enorme diversidad de organismos.

Los científicos enfatizan que la única manera de detener este proceso es reducir las emisiones globales de CO₂. Sin embargo, es urgente centrar los esfuerzos en la protección de las especies más vulnerables. De lo contrario, la humanidad podría perder ecosistemas enteros de los que depende la sostenibilidad de la vida en el planeta.