Se revelan las singulares preferencias gastronómicas de la monarca británica

El rey Carlos III comparte secretos de sus aperitivos inusuales favoritos y sus opiniones sobre la agricultura.
Durante una reciente visita al Castillo de Lancaster como parte de su visita oficial a Lancashire, el rey Carlos III de Gran Bretaña reveló sus inusuales preferencias alimentarias y sus puntos de vista sobre la agricultura.

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Durante una visita al Castillo de Lancaster, donde asistió a una ceremonia de entrega de llaves y se reunió con veteranos de la Segunda Guerra Mundial, el rey Carlos no ocultó su amor por ciertas exquisiteces. Mostró especial interés por el queso de oveja, que le ofrecieron en una exposición de productos locales. En una conversación con la dueña de la granja, Gillian Hale, confesó que le gusta comer queso de oveja con galletas digestivas, una combinación inusual que, según él, disfruta.
Curiosamente, a pesar de su pasión por el queso, ha declarado públicamente que renuncia por completo a la carne y el pescado dos días a la semana, y a los productos lácteos uno de ellos. Esto subraya su compromiso con las prácticas agrícolas orgánicas y sostenibles, que lleva promoviendo activamente más de 40 años.
El rey Carlos III es uno de los defensores más destacados de la agricultura ecológica y los productos ecológicos. En 1990, creó su propia línea de productos orgánicos bajo la marca Duchy Originals, y en 2017 pronunció un discurso en el que enfatizó que el futuro de la humanidad depende directamente del desarrollo de la agricultura ecológica. Señaló que su propio camino hacia la agricultura ecológica comenzó en la década de 1980, cuando decidió abandonar los métodos industriales y adoptar una agricultura natural.
Durante años han circulado rumores sobre los inusuales hábitos alimenticios del rey. Por ejemplo, en 2006, un periodista británico afirmó que el príncipe heredero Carlos exige que la cocina del palacio le hierva siete huevos al día, de los cuales solo come uno para garantizar su calidad. Sin embargo, en respuesta a estos rumores, un portavoz del palacio afirmó que esto era falso y que el rey nunca había practicado tal práctica.
Kate Mackin, propietaria de un negocio de Lancashire, dijo que el Rey había mostrado un interés particular en la agricultura regenerativa y el uso de lana local, lo que estaba en línea con su postura ambiental.
Durante su visita al Castillo de Lancaster, el Rey participó en la tradicional ceremonia de entrega de llaves, que se celebra desde 1851. Ese día, recibió las llaves simbólicas del castillo, una importante tradición histórica que simboliza confianza y respeto. Esta ceremonia se celebró por primera vez en honor a la reina Victoria y, en 2015, en honor a la reina Isabel.
A pesar de la cálida bienvenida, se esperaba que el rey se encontrara con manifestantes. Un grupo de activistas antimonárquicos se reunió con pancartas y coreó lemas como "No es mi rey", "Abolir la monarquía" y "Abandonen el ducado".
mk.ru