La nave Starship de SpaceX explota durante una prueba de rutina en Texas

Un cohete SpaceX Starship explotó el miércoles en las instalaciones de Starbase en Texas durante una prueba de rutina en preparación para un vuelo de lanzamiento, según las autoridades locales y las imágenes de transmisión en vivo.

El cohete "experimentó una anomalía importante mientras estaba en un banco de pruebas en Starbase" a las 11 p.m. hora local, dijo SpaceX en las redes sociales, señalando que "se mantuvo un área despejada de seguridad alrededor del sitio durante toda la operación y todo el personal está a salvo y contabilizado".

Las autoridades locales informaron que Starship sufrió una falla catastrófica y explotó, sin que se reportaran heridos al momento de escribir este artículo, y la investigación está en curso. Imágenes en vivo de Starbase mostraron cómo el cohete se incendió, lanzando una gran bola de fuego al cielo.

Se esperaba que otro lanzamiento de Starship tuviera lugar a finales de este mes.

Ha sido un viaje tormentoso para la gigantesca Starship de Elon Musk, después de que tres intentos de lanzamiento en vuelo culminaran en una gloria deslumbrante y escombros que detenían el tráfico aéreo en lo que va de año. Cabe destacar que el modelo de cohete ha despegado con éxito en ocasiones anteriores, pero su enorme escala —120 metros (394 pies) de altura incluyendo el propulsor Super Heavy— ha suscitado inquietudes sobre su fiabilidad general y los requisitos de reabastecimiento orbital una vez en vuelo.

Sin embargo, Musk ha depositado sus esperanzas en Starship como el vehículo clave para la tercera y cuarta misión Artemis de la NASA —parte de un plan más amplio para el regreso de humanos a la Luna—, previstas para 2027-2028. El cohete también participará en el lanzamiento de la estación espacial privada Starlab en la transición a laboratorios espaciales comerciales una vez que la Estación Espacial Internacional se retire después de 2030.

Es crucial que Starship también sea fundamental para las ambiciones más amplias de Musk —y de su exaliado, el presidente estadounidense Donald Trump— de colonizar Marte. El cohete transportará robots Optimus al planeta rojo a finales de 2026. Musk declaró en marzo: «Si esos aterrizajes salen bien, los aterrizajes humanos podrían comenzar ya en 2029, aunque es más probable que sea en 2031».

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