El tirador tenía como objetivo la sede de la NFL y afirmó tener ETC

Un hombre armado que mató a cuatro personas en un edificio de oficinas de Manhattan antes de suicidarse intentaba atacar la sede de la NFL, pero tomó el ascensor equivocado, dijeron las autoridades el martes.

Los investigadores creen que Shane Tamura, un trabajador de casino de Las Vegas de 27 años, estaba tratando de llegar a las oficinas de la NFL después de disparar a varias personas el lunes en el vestíbulo del edificio, pero accidentalmente entró en el conjunto equivocado de ascensores, dijo el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, en entrevistas.

Cuatro personas, entre ellas Didarul Islam, agente de policía de la ciudad de Nueva York que se encontraba fuera de servicio, murieron. Tamura, quien jugó fútbol americano en la escuela secundaria de California hace aproximadamente una década, pero nunca en la NFL, tenía antecedentes de enfermedades mentales, según informó la policía.

Una nota de tres páginas hallada en la billetera de Tamura sugería que tenía una queja contra la NFL por una denuncia de encefalopatía traumática crónica. Esta enfermedad cerebral degenerativa se ha relacionado con conmociones cerebrales y otros traumatismos craneoencefálicos repetidos, comunes en deportes de contacto como el fútbol americano, pero solo se puede diagnosticar tras el fallecimiento de una persona.

En la nota, Tamura se disculpó repetidamente y solicitó que se le realizara un estudio cerebral para detectar ETC, según el departamento de policía. La nota también mencionaba al exjugador de la NFL Terry Long, diagnosticado con ETC, y la forma en que Long se suicidó en 2005. La nota acusaba a la NFL de ocultar los peligros para el cerebro de los jugadores con fines de lucro.

El New York Post informó el martes que la nota también mencionaba "League of Denial", un documental de PBS sobre las conmociones cerebrales en la NFL, y a los "Hermanos Fainaru", una aparente referencia a los reporteros de ESPN Mark Fainaru-Wada y Steve Fainaru, quienes escribieron un libro publicado junto con el documental. También mencionaba a varios médicos destacados que han estudiado las conmociones cerebrales.

La NFL negó durante mucho tiempo el vínculo entre el fútbol americano y la CTE, pero reconoció la conexión en un testimonio ante el Congreso en 2016 y ha pagado más de 1.400 millones de dólares a jugadores retirados para resolver reclamos relacionados con conmociones cerebrales.

Cuando se le preguntó si a Tamura le harían la prueba de ETC, Adams dijo a CNN que el médico forense de la ciudad tomaría esa determinación.

En respuesta a ESPN, la oficina del médico forense declaró: "El médico forense está investigando y compartirá la causa y la causa de la muerte cuando esté disponible. Un examen del cerebro (neuropatología) es parte del proceso completo de la autopsia".

El comisionado de la NFL, Roger Goodell, calificó el tiroteo como "un acto de violencia indescriptible en nuestro edificio" y dijo que estaba profundamente agradecido con los agentes del orden que respondieron y con el oficial que murió protegiendo a otros.

Goodell dijo en un memorando al personal que un empleado de la liga resultó gravemente herido en el ataque y fue hospitalizado en condición estable.

Goodell añadió que habrá un mayor número de efectivos de seguridad en las oficinas de la liga en los próximos días y semanas. Posteriormente, indicó que los empleados de Nueva York deberían teletrabajar al menos hasta el 8 de agosto y que la oficina permanecerá cerrada durante este tiempo hasta que confirmemos que el edificio está listo para el regreso.

"Cada uno de ustedes es un miembro valioso de la familia de la NFL", dijo Goodell. "Juntos superaremos esto".

El tiroteo ocurrió en el número 345 de Park Avenue, una de las calles más conocidas del país, a pocas cuadras de Grand Central Terminal y del Rockefeller Center. También está a menos de 15 minutos a pie de donde el director ejecutivo de UnitedHealthcare, Brian Thompson, fue asesinado a tiros en diciembre por un hombre que, según la fiscalía, estaba furioso por la avaricia corporativa.

El entrenador de los New York Giants, Brian Daboll, y el entrenador de los Atlanta Falcons, Raheem Morris, abrieron sus comentarios en sus respectivos campos de entrenamiento haciendo referencia al tiroteo.

"Todos ustedes vieron lo que pasó allí en 345 Park; fue trágico", dijo Daboll, quien agregó que no había tenido ninguna conversación con los jugadores o el personal de los Giants sobre la situación.

"Quiero empezar por abordar la violencia sin sentido que ocurrió en Nueva York", dijo Morris. "Enviamos nuestros pensamientos y oraciones a todos los involucrados, incluyendo a uno de los nuestros".

El presidente Donald Trump dijo el martes que conoce bien esa zona de Manhattan.

"Confío en que nuestras fuerzas del orden lleguen al fondo de por qué este lunático demente cometió un acto de violencia tan insensato. Mi corazón está con las familias de las cuatro personas asesinadas, incluido el agente de policía de Nueva York, que hizo el sacrificio máximo", publicó Trump en redes sociales.

Los investigadores descubrieron que Tamura, quien trabajaba en seguridad en el Horseshoe Las Vegas pero no se presentó a su turno el domingo, condujo por todo el país durante los últimos días y llegó a la ciudad de Nueva York justo antes del tiroteo, dijo la comisionada de policía Jessica Tisch.

Tisch añadió el martes que los investigadores planean interrogar a un hombre que suministró piezas para el arma utilizada en el ataque. El rifle tipo AR-15 se ensambló con piezas, incluyendo un receptor inferior, compradas por un socio, según Tisch.

La policía ha localizado a ese socio y lo interrogará sobre una compra, dijo.

Un video de vigilancia mostró al hombre armado saliendo de un BMW estacionado en doble fila aproximadamente a las 6:30 p.m. ET del lunes por la noche con un rifle y luego marchando a través de una plaza y hacia el rascacielos, que también alberga la firma de inversión Blackstone y otras compañías.

Tamura disparó contra el vestíbulo, matando a Islam, quien se encontraba fuera de servicio y trabajando en un equipo de seguridad corporativa, e hirió a una mujer que intentó refugiarse, según Tisch. Después, se dirigió a los ascensores, donde disparó contra un guardia de seguridad y contra otro hombre en el vestíbulo, según el comisionado.

"Parecía haber pasado primero junto al oficial y luego giró a su derecha, lo vio y disparó varias veces", dijo Adams en una entrevista televisiva.

Según Jeff Darlington de ESPN, a los empleados de la NFL se les indicó que se resguardaran en sus hogares. Las oficinas de la NFL se encuentran entre el quinto y el octavo piso del edificio de 44 plantas.

Tamura tomó un ascensor hasta las oficinas del piso 33 de la empresa propietaria del edificio, Rudin Management, y disparó y mató a una persona en ese piso. Luego se suicidó, declaró el comisionado.

Blackstone confirmó que uno de sus empleados, el ejecutivo inmobiliario Wesley LePatner, se encontraba entre los fallecidos. Julia Hyman, quien trabajaba como asociada en Rudin Management, y el agente de seguridad Aland Etienne también fallecieron, según la Oficina del Médico Forense Jefe de la Ciudad de Nueva York.

"No hay palabras para expresar la devastación que sentimos", declaró Blackstone. "Wesley era un miembro muy querido de la familia Blackstone y la extrañaremos profundamente. Era brillante, apasionada, cálida, generosa y muy respetada dentro y fuera de nuestra firma".

Islam era un inmigrante bangladesí de 36 años que había servido como agente de policía en la ciudad de Nueva York durante tres años y medio, según declaró Tisch en una conferencia de prensa. Su cuerpo estaba envuelto en la bandera del Departamento de Policía de Nueva York mientras era trasladado del hospital a una ambulancia, con sus compañeros en posición de firmes.

Sus restos, envueltos en una bandera, llegaron el martes por la tarde a la mezquita del Bronx para preparar su funeral.

"Estaba haciendo el trabajo que le pedimos. Se puso en peligro. Hizo el sacrificio máximo", dijo Tisch. "Murió como vivió: un héroe".

Adams visitó la escena más tarde ese mismo día y recordó haber trabajado en la sala de correo del edificio cuando era joven.

"Tener que caminar y ver los restos de la violencia a ese nivel me desgarró", dijo a los dolientes en una vigilia vespertina multirreligiosa por los fallecidos.

Líderes musulmanes, sikhs, budistas, hindúes, cristianos y de otras religiones ofrecieron oraciones en la reunión celebrada en un parque a una docena de cuadras de donde ocurrió el tiroteo.

Adams dijo que uno de los desafíos de la investigación ha sido que Tamura llegó a Nueva York poco antes del tiroteo, dejando pocas pistas en la zona.

"Nos comunicaremos con los socios federales y estatales en Las Vegas para profundizar en esto lo más posible, incluyendo revisar sus redes sociales y cualquier cosa que tenga en su casa, para que podamos seguir reconstruyendo esta investigación", dijo Adams.

The Associated Press contribuyó a este informe.