Encarcelar a inmigrantes ilegales en el "Alcatraz de los osos" es la nueva idea "descabellada" de un asesor de Trump

Los inmigrantes ilegales en Estados Unidos pronto podrían encontrarse enfrentando la naturaleza salvaje de Estados Unidos —posiblemente incluso osos pardos— si uno de los principales asesores de Donald Trump consigue su deseo.

Stephen Miller, subjefe de gabinete de políticas de la Casa Blanca , ha instado a los estados liderados por republicanos a seguir el ejemplo de Florida y construir controvertidos centros de detención para inmigrantes ilegales, similares al recientemente inaugurado "Alligator Alcatraz" en el Estado del Sol, informa MailOnline.

“Todo gobernador de un estado republicano, si está mirando esta noche: levante el teléfono, llame al [Departamento de Seguridad Nacional], trabaje con nosotros para construir instalaciones en su estado para que podamos sacar a los ilegales y criminales”, dijo Miller durante una aparición en The Ingraham Angle de Fox News.

El estado de Alaska se sumó rápidamente a la idea. Un portavoz declaró al programa: «No tenemos caimanes, pero tenemos muchos osos». El estado alberga aproximadamente 100.000 osos negros, 30.000 osos pardos y hasta 7.000 osos polares. Sin embargo, el mismo portavoz señaló que actualmente no hay planes para una versión norteña de la controvertida instalación de Florida.

Mientras tanto, Donald Trump expresó su esperanza de ver más centros remotos de este tipo desplegados en todo el país. "Florida tendrá un segundo, y probablemente un par más", afirmó. "En algún momento, podrían transformarse en un sistema que se mantendrá durante mucho tiempo".

Elogiando la ubicación inquietante y aislada de las instalaciones, añadió: «Podría ser tan buena como la verdadera Alcatraz... esa también es espeluznante. Es un sitio difícil. De verdad creo que podría durar tanto como quieran».

El expresidente desestimó las críticas al plan y dijo: "No me importa en absoluto" que sea controvertido.

Trump visitó el centro de detención de Florida esta semana, el cual ha recibido fuertes críticas de demócratas y activistas. Las instalaciones cuentan con jaulas metálicas con camas similares a las de una prisión, sin inodoros, lavabos ni zonas de comedor visibles. Según Trump, los migrantes que decidan regresar a casa voluntariamente podrán hacerlo.

También reveló planes para eximir de la deportación a los trabajadores agrícolas y de la construcción. "Pueden estar aquí legalmente. Pueden pagar impuestos y todo lo demás. No obtienen la ciudadanía, pero sí otras cosas", dijo.

Trump confirmó que había dado luz verde al gobernador de Florida, Ron DeSantis, para que miembros de la Guardia Nacional actúen como jueces, con la facultad de decidir quién debe ser deportado. "Sí, tiene mi aprobación. No fue muy difícil conseguirla", dijo.

En una crítica a su predecesor, Trump bromeó: «Biden me quería aquí», señalando las austeras instalaciones. «No funcionó así. Él me quería aquí».

A pesar de su rivalidad previa durante las primarias republicanas, Trump ahora afirma que él y DeSantis disfrutan de una sólida relación de trabajo. "Es un diez, un 9,9. Un par de pequeñas heridas. Creo que tenemos un 10. Nos llevamos de maravilla", dijo.

DeSantis se hizo eco de esa opinión: "Pueden llamarlo en cualquier momento y quiere ayudar a los gobernadores. Se lo aseguro".

El llamado "Alcatraz de los Caimanes" ya ha generado reacciones negativas. Ubicado en un pantano a 60 kilómetros de Miami, el sitio está rodeado de caimanes y serpientes, y es vulnerable a huracanes.

Los demócratas lo han condenado como inhumano, mientras que grupos ambientalistas han presentado demandas en un intento de detener sus operaciones.

"Es como una teatralización de la crueldad", dijo María Asunción Bilbao, del Comité de Servicio de los Amigos Americanos. Mientras tanto, el congresista demócrata Maxwell Frost lo calificó de "campo de prisioneros improvisado".