Estrellas Michelin y bebidas artesanales definen la historia culinaria de Gotemburgo, Suecia
En los últimos años, Gotemburgo ha ascendido de forma silenciosa pero sostenida en el mapa culinario mundial, recibiendo elogios no solo por sus mariscos y sabores escandinavos, sino también por sus audaces incursiones en el vino natural, la cerveza artesanal y los licores artesanales.
Los restaurantes de la ciudad costera siguen impresionando, con lugares como Bhoga, Koka, SK Mat & Människor y Project, todos reconocidos en la Guía Michelin por sus platos innovadores basados en productos locales y prácticas sustentables.
Incluso más allá de los listados Michelin, muchos restaurantes de barrio pequeños conquistan a los visitantes con una cocina creativa, una hermosa presentación y un profundo compromiso con los ingredientes locales y de temporada.
Tan solo el año pasado, se abrieron más de 40 nuevos restaurantes, cafeterías y locales, lo que llevó a la revista VIE a señalar: «La ciudad sueca, rebelde y culinaria, apenas está comenzando. El panorama culinario de Gotemburgo, Suecia, está en pleno auge, con más de cuarenta nuevos restaurantes, cafeterías y destinos gastronómicos que se perfilan para causar sensación en 2025».
Sin embargo, el impulso creativo de Gotemburgo va mucho más allá del plato. Ego Distillers obtuvo el título de Mejor Ginebra de Estilo Contemporáneo de Suecia en los World Gin Awards 2025. Mientras tanto, vinotecas como Bar Bulot han sido elogiadas en Star Wine List por su cuidada selección, que promueve productos naturales y sostenibles.
Gotemburgo se ha consolidado como la capital sueca de la cerveza artesanal, a menudo considerada por The Daily Beast como "la escena cervecera más cool de Europa", y alberga alrededor de 40 cervecerías. Entre ellas se incluyen nombres históricos como Dugges y Stigbergets, así como nuevas empresas como Spike Brewery, reconocida en Untappd por sus innovadoras cervezas de lotes pequeños.
En conjunto, estos logros reflejan una ciudad que no teme experimentar, manteniéndose fiel a sus raíces costeras. Gotemburgo ofrece a los turistas la oportunidad de explorar barrios de moda, experimentar nuevas ideas culinarias y disfrutar del paisaje y el aire fresco de su archipiélago.
Los chefs de Gotemburgo trabajan con ingredientes frescos y locales, provenientes de la tierra y el mar, guiados por las estaciones y con un fuerte enfoque en la sostenibilidad. La escena gastronómica de Gotemburgo combina creatividad y pasión.
Dentro del Mercado Central de la ciudad, Stora Saluhallen , el Bar Bulot sirve exquisitos platos de temporada para el almuerzo. Su restaurante hermano, Bulot, con servicio completo, ofrece una carta de mariscos más refinada, de inspiración francesa, y cuenta con una recomendación Michelin .
Hjördis , que lleva el nombre de la querida tía del propietario, saltadora olímpica e inspiración culinaria, nace de la pasión, la familia y un sueño. Hjördis plasma los sabores de la infancia y los años de experiencia en la industria en platos suecos arraigados en recuerdos y experiencias.
Suber, un bar de vinos escandinavo-francés, refleja la visión compartida de las hermanas Wilma y Klara, veteranas de las mejores cocinas de Gotemburgo que convirtieron su sueño de larga data en realidad.
Collage , ubicado en una antigua fábrica de puros y bodega, es una brasserie de estilo francés con reminiscencias de París y Nueva York. Bikt mantiene un ambiente dinámico, con una carta que cambia con frecuencia, inspirada en sabores de toda Europa, y un ambiente informal e íntimo.
En el piso 23 de Gothia Towers, Heaven 23 ofrece una moderna gastronomía sueca con vistas panorámicas de la ciudad y su emblemático sándwich de camarones tamaño king, que lo dejará gratamente satisfecho.
Cuando visite el archipiélago sur de Gotemburgo, una zona peatonal, no deje de visitar el Popsicle Café . Regentado por las hermanas Kristin y Klara, sirven helado casero, repostería fresca y abundantes raciones de räksallad, la clásica ensalada cremosa de camarones de Suecia.
El apetito de Gotemburgo por la innovación se extiende más allá de la comida.
En el barrio de Gamlestaden, la energía creativa aflora en lugares como Wine Mechanics . Aquí, Kenneth Gustafsson, exfutbolista profesional, y el campeón de descascarado de ostras Johan Malm han construido la primera bodega urbana de los países nórdicos.
Las uvas europeas llegan a Gotemburgo para ser transformadas en vinos de producción limitada, muchos de los cuales llevan nombres que reflejan el espíritu lúdico del equipo, como "50 Sombras de Riesling". La sala de catas de la bodega rebosa de conversación y buen humor.
La Cervecería Spike fusiona música y cerveza bajo un mismo techo industrial. Los tanques de fermentación se alzan tras vitrinas mientras los visitantes saborean cervezas con nombres divertidos como "Rock to Fakie".
Los fines de semana, los DJ animan el ambiente mientras los comensales se reúnen en mesas comunes, juegan o simplemente disfrutan del ambiente. Es un lugar donde la elaboración de cerveza se centra tanto en la experiencia como en el producto.
Ego Distillers añade licores a la mezcla. Ubicado en lo que antiguamente era una sala de máquinas, este híbrido de bar y destilería ofrece una carta centrada en sus propios licores de elaboración casera.
Su ginebra Ego Gin ya ha obtenido el reconocimiento como la mejor ginebra de estilo contemporáneo de Suecia en los World Gin Awards, lo que demuestra que la escena de destilación de Gotemburgo es tan dinámica como sus cervecerías y bodegas.
En conjunto, la cultura gastronómica de Gotemburgo combina tradición y nuevas ideas: ya sea en lo alto de la ciudad o en el interior de un puerto en una isla tranquila, sus cocinas y bares sirven sabores tan frescos y genuinos como la brisa marina que sopla desde el oeste.
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