Ulrich Kater, economista jefe de Deka: Qué hará la Reserva Federal de EE. UU. el miércoles

Dado que Irán no solo es un importante país productor de petróleo, sino que también controla importantes rutas de transporte, existe la preocupación en los mercados de capitales de que una mayor escalada también tenga consecuencias negativas para la economía mundial. En consecuencia, no solo los precios del petróleo, sino también los mercados de riesgo globales están reaccionando con sensibilidad a la situación.

Además de estas incertidumbres geopolíticas, los mercados siguen evaluando el impacto de los aranceles y las restricciones comerciales globales. Hasta el momento, la economía mundial ha podido afrontar estas cargas mucho mejor de lo que se temía. Y las perspectivas, en general, también apuntan a una desescalada.

Sin embargo, el resultado de las conversaciones comerciales entre Estados Unidos y China, que tuvieron lugar en Londres la semana pasada, sugiere que ambas partes tienen medios efectivos de presión y que el acercamiento llevará tiempo.

Por lo tanto, los mercados deben adaptarse a una base arancelaria permanentemente incrementada y a una reestructuración constante de la economía mundial. Las perturbaciones geopolíticas adicionales resultan especialmente incómodas durante esta fase.

Estos problemas también suponen un reto para la Reserva Federal de Estados Unidos, que se reunirá el próximo miércoles para decidir sobre los tipos de interés. El punto de partida es complejo, ya que los aranceles y las amenazas de aranceles han tenido un impacto negativo en la confianza empresarial y del consumidor, pero aún son apenas visibles en los datos económicos.

La economía estadounidense continúa creciendo de forma sostenida, y los efectos arancelarios son difíciles de detectar en las cifras de inflación. Por lo tanto, no hay motivos para recortar los tipos de interés a corto plazo, pero existe la posibilidad de reducciones moderadas más adelante en el año.