Descubren en Gerona al 'excavador del volcán', un topo de hace 3,5 millones de años

Un equipo de investigadores del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES-CERCA), la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y el Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont (ICP-CERCA) ha identificado una nueva especie y género de topo al que han denominado Vulcanoscaptor ninoti, el 'excavador del volcán'. El fósil de 3,5 millones de años se ha desenterrado en el yacimiento del Camp dels Ninots (Caldes de Malavella, Girona), localizado en el cráter de un volcán surgido hace 5 millones de años.
El esqueleto conserva la mandíbula con la dentición completa, parte del tronco y varios huesos de las extremidades anteriores y posteriores, muchos de ellos en conexión anatómica. Esta preservación excepcional es muy poco habitual en pequeños mamíferos como los topos, lo que convierte este ejemplar en uno de los más antiguos y completos conocidos hasta la fecha en Europa. La investigación aparece publicada en la revista 'Scientific Reports'.
El análisis anatómico y filogenético ha revelado que Vulcanoscaptor ninoti pertenece al grupo de los Scalopini, una tribu de topos que actualmente solo habita en América del Norte y algunas zonas de Asia. «A pesar de su morfología claramente adaptada a excavar, este topo está estrechamente emparentado con especies norteamericanas de los géneros Scapanus y Scalopus, lo que indica una historia evolutiva mucho más compleja de lo que se había considerado para estos animales», explica el doctor Marc Furió, coautor del artículo. «Su presencia en Europa .-añade- sugiere la existencia de migraciones transcontinentales de topos en el pasado, en contra de la idea de que son mamíferos con escasa capacidad de dispersión».
El fósil se encontraba parcialmente incrustado en un bloque de sedimento muy compacto y fue extraído íntegramente durante la excavación. Para estudiarlo con detalle sin dañarlo, se aplicó un escaneo de microtomografía computarizada (micro-TC), que ha permitido realizar una reconstrucción digital tridimensional del esqueleto con gran precisión.
«Gracias a la micro-TC hemos podido analizar estructuras muy pequeñas y delicadas, como las falanges o los dientes, que difícilmente podrían haberse estudiado sin este tipo de tecnología», explica Adriana Linares, autora principal del estudio e investigadora del IPHES-CERCA. «Esto nos ha permitido identificar rasgos anatómicos únicos, que han confirmado la adscripción del nuevo taxón al grupo de los Scalopini».
Las partes conservadas incluyen la mandíbula completa con dentición, el radio, la ulna y el húmero del brazo derecho, parte de la cintura escapular, los metacarpos, varias falanges, la tibia y el peroné fusionados, una falange posterior y diversos huesos del pie. Según los autores, esta conservación extraordinaria ofrece una oportunidad única para comprender la anatomía funcional de este topo y sus adaptaciones ecológicas.

La estructura del antebrazo y las extremidades anteriores muestra un alto grado de adaptación a la vida subterránea. El húmero es muy robusto, con crestas bien desarrolladas y grandes superficies de inserción muscular, mientras que las falanges apuntan a una gran eficacia excavadora.
«Sin embargo, el hecho de que este ejemplar se conservara en sedimentos lacustres y en posición lateral plantea la posibilidad de que también tuviera alguna capacidad de desplazamiento acuático», señala Linares. «Aún no podemos afirmarlo con certeza, pero existen otros topos modernos altamente excavadores que también son buenos nadadores».
El yacimiento de Camp dels Ninots se encuentra en el interior del cráter de un mar volcánico del Plioceno, posteriormente rellenado por sedimentos lacustres. Según los investigadores, este entorno ha generado unas condiciones de preservación excepcionales que han permitido conservar un registro fósil extraordinariamente bien conservado. Allí se han encontrado gran diversidad de restos de vertebrados (grandes mamíferos, microfauna, aves, anfibios, reptiles y peces), macrorrestos vegetales, polen y microorganismos.
La descripción de Vulcanoscaptor ninoti confirma que la historia evolutiva de los topos ha sido mucho más dinámica de lo que se creía, con posibles migraciones intercontinentales y una diversidad anatómica subestimada. También pone en valor la importancia de los yacimientos con condiciones de conservación excepcionales para documentar especies que rara vez se preservan en el registro fósil, como los pequeños mamíferos.
ABC.es