La geopolítica sacude el orden económico mundial: la incertidumbre es la nueva norma

La incertidumbre como norma. Navegamos un 2025 convulso, repleto de incertezas y desafíos, con el recrudecimiento de antiguos y nuevos conflictos que agitan la geopolítica mundial alterando mercados, finanzas y vidas.

'Pautas para navegar un 2025 de incertidumbres y desafíos' fue el eje central del foro que El Confidencial y PIMCO compartieron el miércoles 25 en el auditorio madrileño El Beatriz. La llegada a la presidencia de Donald Trump el pasado 20 de enero, en su segundo mandato al frente de una superpotencia como Estados Unidos, ha tenido su papel en la agitación del tablero internacional con la activación de políticas proteccionistas que han convulsionado los mercados globales en altibajos de ataque y contraataque.

Desde este punto de partida, se han sucedido casi dos horas de análisis dialéctico con dos ponentes sobresalientes como Richard Clarida, ex vicepresidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, y managing director de la oficina de PIMCO en Nueva York, y Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell, que llega a este foro en un momento crucial para el futuro de su entidad, bajo la amenaza de la OPA del BBVA y justo un día después de que el Gobierno haya endurecido las condiciones para autorizarla.

“El mundo que conocíamos ya no existe y no es extraño que la economía pierda impulso”, manifestó en la apertura Nacho Cardero, director de El Confidencial. Al cocktail explosivo de la guerra entre Ucrania y Rusia en Europa, y el sempiterno polvorín de Oriente Medio se suma Irán, y el reciente ataque de los norteamericanos contra instalaciones nucleares iraníes siguiendo la estela de Israel.

Con todo, Richard Clarida sostuvo que "los fundamentos del consumo estadounidense son, históricamente, sólidos”, sobre un dólar que estadísticamente también se mantiene estable. También que existe un “mayor margen de maniobra” para el recorte de los tipos de interés por parte de los bancos centrales que antes del 2020, con el punto de inflexión que marcó la pandemia.

Clarida: Los bonos proporcionan un colchón para navegar en un mundo fragmentado

Clarida dialogó pausadamente con Juanma Jiménez, el vicepresidente de PIMCO, durante una ponencia que denominaron “La era de la fragmentación”, y que se sostuvo en datos estadísticos.

El exvicepresidente de la FED pronosticó que “los bonos están posicionados para tener un buen rendimiento en términos absolutos y relativos tras el ajuste de los rendimientos". No obstante, admite que es probable que ciertas "correlaciones negativas" entre acciones y bonos hayan regresado a los mercados. "“Proporcionan un colchón para navegar en un mundo fragmentado”, defendió Clarida.

El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, sucedió a Clarida en el escenario para conversar con el periodista de El Confidencial, Javier Jorrín, en una ponencia que llamaron “La banca frente al nuevo orden global: riesgos y oportunidades”. Una conversación que se produce en un momento trascendente para el futuro de la entidad financiera enraizada en Cataluña -que se trasladó temporalmente a Alicante durante el “procés” y que ha regresado a su sede histórica en la localidad catalana.

“Tras la crisis financiera, la regulación ha evolucionado y el sistema tiene una robustez que no teníamos en el 2007”, manifestó Oliu, que esta misma semana asistía al endurecimiento de las condiciones por parte del Gobierno para que el BBVA prospere en su OPA al Sabadell. “La solvencia de los bancos está fuera de duda. La cultura de riesgos que se ha generado estos años es diferente y también los sistemas de gobernanza”, argumentó.

El financiero catalán fue claro con respecto al sector inmobiliario y a la preocupación por la vivienda que ha escalado en las encuestas como el principal problema (y preocupación) en España. “No hay un riesgo de burbuja inmobiliaria en España y Estados Unidos”, concluyó. Si bien, admite que “del exterior cada vez vienen nuevos riesgos” con una preocupación creciente por los aranceles.

"Estamos en una etapa de suspense, ya que Trump es poco diplomático. Antes eran del 5%, ahora el 14% y no sabemos dónde va a acabar", resumió Oliu, que apostó “por consolidar el mercado de capitales y bancos para la integración del sistema financiero europeo”. “Hay que fomentar desde el punto de vista político que suceda para hacer grandes bancos de inversión europeos. Ocurrirá si tiene el marco y los incentivos suficientes para que surjan en Europa”, concluyó.

Cambio en las reglas del juego

A las exposiciones de Clarida y Oliu, le sucedió una nutrida mesa redonda en la que participaron José Manuel González-Páramo, exconsejero ejecutivo del BE y presidente del Consejo de Administración de European Data Warehouse; Nemesio Fernández-Cuesta, Senior Energy Advisor de Alantra Partners; Raymond Torres, director de Coyuntura Económica de Funcas y Miguel Otero, investigador principal del Real Instituto Elcano.

“¿Los riesgos políticos ahora son distintos?”, les planteó Ramón González Ferriz, periodista de El Confidencial. “El elemento nuevo es que no conocemos las reglas del juego”, respondió Raymond Torres. “Vamos a tener que asumir un mayor liderazgo de los Estados a nivel mancomunado para asegurar la defensa europea en un contexto en el que el aliado norteamericano ha dicho que no está seguro de garantizarla”. “Conviene perfeccionar la intervención del Estado en los bienes públicos y confiar en el mercado”, apostilló Torres.

Fdez-Cuesta: "Estados Unidos ha bombardeado Irán y no ha pasado nada en los mercados"

Desde su experiencia en el sector energético, Fernández-Cuesta rompió el hielo para hacer una reflexión en voz alta sobre un escenario internacional que convulsiona con demasiada frecuencia en escenarios bélicos. “Estados Unidos ha bombardeado Irán -gran productor de Oriente Medio- y no ha pasado prácticamente nada en el mercado”, refirió, tras señalar que otro de los cambios fundamentales es que USA ha pasado a ser un “exportador neto de petróleo y gas”.

“El eje sobre el que ha pivotado el orden económico mundial en los últimos 70 años se ha resquebrajado”, consideró González Páramo, ahondando en la idea compartida de que las reglas del juego geopolítico han cambiado y la incertidumbre es la nueva norma. Páramo hizo hincapié en “aranceles más altos de los que estamos acostumbrados” pero señaló una contrapartida para la Administración de Trump. “Está en una posición más débil que antes del anuncio de los aranceles recíprocos”, apuntó.

Por su parte, el investigador Miguel Otero profundizó en la idea de que "la geopolítica manda”. Trazó un paralelismo entre el periodo actual y el mandato de Richard Nixon (1969-1974) con China rivalizando con Estados Unidos y desplazando a Europa en ese binomio. “El desafío que representa China para la hegemonía norteamericana no se ha visto en los últimos 70 años”.

“¿Se puede dar la paradoja de que caminemos hacia un capitalismo más de Estado y desandar la regulación europea de los últimos años?”, les planteó Férriz. “Una cosa es tener una parte del accionariado en industrias estratégicas y otra cosa es entrar en la gestión, poniendo presidentes y directores”, concluyó Páramo. “Necesitamos que la Unión Europa funcione como un país, con alianzas de geometría variable”, apuntó Fernández-Cuesta.

En la recta final, todos los ponentes respondieron a una pregunta común: ¿A qué riesgos no estamos prestando atención?. Para Raymond Torres son “los conflictos bélicos” como “riesgo mayor”. En opinión de Páramo, es preciso “tener la casa en orden” para una respuesta ágil ante la adversidad, mientras que Fernández-Cuesta llamó a “la adaptación al cambio climático”. Por último, Miguel Otero, advirtió de la stablecoins, llamadas criptomonedas estables. “Cualquiera pueda emitirlas pero nadie podrá controlarlas”, vaticinó.