Debate nacional: Rubén Moreira (PRI) denuncia aumento incontrolado de desapariciones y violencia política bajo administración de Morena

El diputado federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rubén Moreira Valdez, lanzó una severa y contundente crítica este domingo 18 de mayo de 2025, denunciando un crecimiento sin control en las desapariciones forzadas, los homicidios y la violencia política en México bajo la actual administración federal encabezada por Morena. Este sombrío panorama, aseguró el legislador, impacta directamente a entidades federativas como Tabasco y arroja una sombra de preocupación sobre los procesos electorales en curso y la gobernabilidad del país.

Desde el Palacio Legislativo de San Lázaro, el coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, expuso datos alarmantes para sustentar su crítica. Según el legislador, del inicio de la actual administración federal en 2018 hasta la fecha, las desapariciones en el país se han incrementado en un alarmante 170 por ciento. Esto se traduce, en promedio diario, de pasar de 15 a 40 personas desaparecidas cada día.

Moreira no limitó sus señalamientos a las desapariciones. También apuntó a un aumento en los homicidios y, de manera particular, a la escalada de la violencia política, un fenómeno que cobra especial relevancia en contextos electorales como el que vive México con la inédita elección para el Poder Judicial y otros procesos locales.

Aunque las declaraciones de Moreira tienen un carácter nacional, sus implicaciones resuenan en todos los estados de la República, incluyendo Tabasco. La violencia generalizada y la incapacidad de las estrategias de seguridad para contenerla, según la perspectiva del PRI, generan un ambiente de incertidumbre y temor que afecta la vida cotidiana de los ciudadanos y puede inhibir la participación democrática.

La violencia política, en particular, es una amenaza directa a los fundamentos de la democracia. Cuando candidatos, funcionarios electos, activistas o periodistas son objeto de amenazas, intimidaciones o atentados, se coarta la libertad de expresión, se limita la competencia política y se erosiona la confianza en las instituciones.

El diputado priista señaló que la narrativa oficial que intenta minimizar la gravedad de la situación de inseguridad no se sostiene ante la realidad que viven millones de mexicanos. La crítica se dirige a la efectividad de la estrategia de seguridad implementada por el gobierno de Morena y a la necesidad de un cambio de rumbo que ofrezca resultados tangibles en la pacificación del país.

Las declaraciones de Rubén Moreira se producen en un momento crucial para el país, en vísperas de la elección para renovar el Poder Judicial de la Federación, un proceso inédito que busca transformar la manera en que se designa a jueces, magistrados y ministros. La preocupación expresada por el legislador es que un clima de violencia e inseguridad pueda afectar la legitimidad y la participación en este y otros comicios.

La seguridad de los candidatos y de los propios ciudadanos durante los procesos electorales es una responsabilidad fundamental del Estado. La capacidad de las autoridades para garantizar un entorno pacífico donde los electores puedan ejercer su voto libremente y los contendientes puedan realizar sus campañas sin temor es un indicador clave de la salud democrática.

Es importante señalar que el gobierno federal y el partido Morena han defendido su estrategia de seguridad, argumentando que se están atacando las causas estructurales de la violencia y que se han logrado avances en la desarticulación de grupos criminales. Sin embargo, la percepción ciudadana y las cifras de delitos de alto impacto continúan siendo un tema de intenso debate político y social.

«No podemos normalizar la violencia ni acostumbrarnos a contar desaparecidos y asesinados todos los días. México merece paz y justicia. Es urgente un golpe de timón en la estrategia de seguridad antes de que la situación sea irreversible.» – Rubén Moreira Valdez, Diputado Federal del PRI.

Las críticas de la oposición, como las expresadas por Rubén Moreira, forman parte del escrutinio necesario en una democracia. El debate sobre la seguridad pública y la violencia política debe conducir a una reflexión profunda y a la búsqueda de soluciones consensuadas que permitan a México superar estos graves desafíos. La situación en estados como Tabasco, aunque con sus particularidades, no es ajena a esta dinámica nacional.

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