Exposiciones de verano: La economía monástica, un modelo de sobriedad

También nos invita a descubrir la economía monástica a través de los tiempos, cuestionando este modelo ante las realidades contemporáneas de sobriedad y desarrollo sostenible. La principal actividad de los monasterios ha sido durante mucho tiempo la agricultura, lo que les permitía vivir de forma autosuficiente, pero esto ya no es así. Los monjes elaboran principalmente productos alimenticios, cosméticos y decorativos, asumiendo el reto de respetar a las personas y al medio ambiente. Estos productos también se integran en la marca Monástica, creada por doscientos monasterios unidos en torno a una reflexión sobre sus justas necesidades y el enfoque espiritual del trabajo monástico.
Es imprescindible visitar la tienda del museo, con sus productos de los padres cartujos, que van desde los elixires vegetales hasta los licores y productos a base de hierbas, sin olvidar las mermeladas de Notre-Dame des Gardes y los patés de Bricquebec.
La economía monástica, un modelo de sobriedad – Hasta el 11 de noviembre en el Museo de la Grande Chartreuse – www.musee-grande-chartreuse.fr
Lyon Capitale