Finanzas públicas: ¿Francia corre realmente el riesgo de quedar bajo la supervisión del FMI?

"Por supuesto que existe el riesgo de ser intervenidos"... Esta mañana, en RTL, la ministra de Hacienda, Amélie de Montchalin, alertó sobre la desastrosa trayectoria de la deuda francesa, que ya supera los 3,3 billones de euros, el 113 % del PIB. Advirtió al mismo tiempo que, a falta de decisiones firmes, el país podría verse obligado a una drástica austeridad por parte de sus acreedores o de organismos internacionales. "Si no tomamos estas decisiones ahora, serán nuestros acreedores o el FMI quienes nos las impondrán", advirtió también en el JDD este domingo .

«Serán cruciales esfuerzos presupuestarios adicionales significativos», advirtió el Fondo Monetario Internacional (FMI) el 22 de mayo, exigiendo medidas «significativas». Esto no difiere mucho de lo que ha hecho el Tribunal de Cuentas, que lleva meses pidiendo medidas enérgicas a los responsables políticos. Y los Sabios de la Rue Cambon no se andan con rodeos, refiriéndose al gasto público «descontrolado» y a una Francia «entre la espada y la pared ». La única señal ligeramente positiva: la semana pasada, la Comisión Europea suspendió el procedimiento de déficit excesivo contra Francia, ya que está «en vías de reducir su déficit presupuestario». Francia ha prometido esfuerzos: un déficit público por debajo del 3 % en 2029, frente al 5,8 % en 2024. Pero ¿será esto suficiente para evitar la posibilidad de ser intervenida?