En Irán, los afganos temen ser expulsados: “Mi vida correría peligro allí”
Con planes de construir una barrera a lo largo de su frontera con Afganistán, el aumento de la represión policial y la demonización de los inmigrantes, Teherán está haciendo todo lo posible para enviar a más de dos millones de refugiados afganos de regreso a su país de origen. Muchos huyeron del régimen talibán hace casi cuatro años y dicen temer por sus vidas, informa el Financial Times.
Mohammed, de 41 años, lleva meses viviendo enclaustrado en el jardín privado donde trabaja, a las afueras de Teherán. Inmigrante afgano e indocumentado, teme tanto ser arrestado y luego deportado por la policía iraní que ni siquiera se atreve a ir a la peluquería.
"Mi esposa hace todas las compras. Mis dos hijos se ponen nerviosos cuando van a la escuela", lamenta el padre de cuatro hijos, quien se negó a dar su nombre completo.
"No puedo vivir en Afganistán bajo el régimen talibán", lamenta Mohammed, quien no tiene cuenta bancaria y se ve obligado a vivir en un edificio en el jardín donde trabaja. "Mi vida correría peligro. Sin mencionar que no hay trabajo ni perspectivas, y tendría que cuidar de mi familia".
Mohammed es uno de los dos millones de afganos que han cruzado la frontera desde que los talibanes tomaron el poder en 2021, según un recuento de las autoridades iraníes. Esta cifra se suma a la de otros migrantes que han llegado a Irán en las últimas décadas.
Teherán ha anunciado su intención de expulsarlos. Mientras el país atraviesa una grave crisis económica y sus líderes se enfrentan a una opinión pública cada vez más hostil,
Courrier International
