Menores en bicicletas sin luces por la noche: es una alarma

Con la llegada del verano, la Policía Local ha comenzado los controles nocturnos extraordinarios en todo el territorio del acuerdo, con dos patrullas activas ayer por la noche, 6 de junio, hasta la medianoche. Se comprobó el cumplimiento del horario de apertura de los minimercados de Stra. Se registró un bar denunciado por perturbar la tranquilidad de los condominios de Saonara. Se realizó un servicio de vigilancia en el festival Galta de Vigonovo. Finalmente, se instaló un puesto de control en Noventa, cerca de Piazza Europa, tras una ronda de patrullaje en las aldeas de Noventana y Oltrebrenta.

Se detuvieron varios vehículos que se encontraban en regla y, lamentablemente, numerosas bicicletas conducidas por menores, completamente sin luces. Los agentes se limitaron a advertir a los chicos, obligándolos a bajarse de las bicicletas y regresar a casa, tras explicarles los peligros de tal comportamiento. «Tener las luces encendidas por la noche —recuerda el comandante Luca Meneghini— no solo es un requisito legal para los ciclistas, sino un dispositivo de seguridad fundamental que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte, como lamentablemente nuestra experiencia ha demostrado en demasiadas ocasiones». «Estos controles —declara el teniente de alcalde de Noventa, Nicola Cannistraci— contribuyen a la seguridad de nuestros conciudadanos a todas horas del día. Por muy eficaz que sea el sistema de videovigilancia, que estamos trabajando para seguir mejorando, nada puede sustituir la presencia en el territorio de los hombres y mujeres de la Policía Local, quienes merecen un enorme agradecimiento por el compromiso y la disponibilidad demostrados».

Este tipo de controles en Noventa Padovana continuará durante el verano con una frecuencia cada vez mayor, especialmente para controlar la velocidad de los vehículos en tránsito. De hecho, el comando ha recibido numerosos informes que indican que vehículos circulan a exceso de velocidad por la Noventana en la dirección que conecta el municipio de Padua con la Riviera del Brenta, a velocidades muy superiores a los 50 kilómetros por hora permitidos por el Código de Circulación. El objetivo declarado de la policía local y, al mismo tiempo, de la administración municipal, dirigida por el alcalde Marcello Bano, es evitar mediante estos controles los graves accidentes de tráfico que en las últimas semanas se han cobrado un número considerable de víctimas en la provincia de Padua.