La exesposa de Celeste Pin se niega a rendirse y busca justicia.

Han surgido nuevos avances en la investigación sobre la muerte de Celeste Pin, exfutbolista de la Fiorentina y veterano capitán, hallado muerto el 22 de julio en su domicilio en las colinas a las afueras de Florencia. La Fiscalía ha abierto una causa por homicidio involuntario contra personas desconocidas y ha ordenado la autopsia, que se realizará mañana en el Instituto de Medicina Legal del Hospital Careggi.
La investigación, coordinada por la fiscal Silvia Zannini, se inició tras una denuncia presentada por la exesposa de Pin, Elena Fabbri, representada por el abogado Mattia Alfano. Esta solicitó investigaciones exhaustivas, incluyendo pruebas toxicológicas, una autopsia y el análisis del contenido del teléfono móvil del exfutbolista, que fue incautado por la policía inmediatamente después del hallazgo del cuerpo.
Fabbri pone en duda la teoría predominante del suicidio. Ella refuta esta hipótesis, describiendo a Pin como una persona positiva, activa y con buena salud mental, hasta el punto de que la posibilidad de un asalto o robo fallido es más plausible. Ayer, las fuerzas del orden, junto con peritos forenses, realizaron un registro minucioso en el domicilio de Pin. El objetivo era identificar objetos útiles para la investigación: dispositivos electrónicos adicionales, documentos, notas o un posible testamento, este último aún no encontrado. La zona fue asegurada para evitar cualquier contaminación de las pruebas.
La Fiscalía no ha descartado ampliar la investigación para incluir indagaciones bancarias, así como para esclarecer los movimientos y el estado mental del exfutbolista en los días previos a su muerte. Según algunos testigos, Pin habría presentado un cambio repentino de humor tras una llamada telefónica que recibió mientras estaba de vacaciones con amigos, detalle considerado relevante para la investigación.
Celeste Pin, de 64 años, era una figura reconocida y respetada en el mundo del fútbol. Anteriormente había sufrido depresión, pero, según su exesposa, estaba en tratamiento y llevaba una vida tranquila y activa, lo que le dificultaba aceptar la posibilidad de un acto voluntario.
Rai News 24