La Rai y el Ayuntamiento de San Remo están a punto de disolver el Festival.

La tensión entre la RAI y el Ayuntamiento de San Remo está creciendo por la organización del próximo Festival.

Según Il Sole 24 Ore, las partes estarían a punto de romper su relación. Las negociaciones llevan una semana prácticamente paralizadas, tras un impasse que se ha ido intensificando con el paso de las semanas desde que el Ayuntamiento de San Remo finalizara la licitación para la organización del Festival —que comenzaría en 2026 y duraría tres años, con posibilidad de prórroga por dos más— en respuesta a una sentencia del Tribunal Administrativo Regional de Liguria (TAR) de finales de 2024, confirmada por el Consejo de Estado a finales de mayo , que había ordenado un concurso público para la cesión de las marcas registradas del Festival, considerando ilegal la adjudicación directa a la RAI para las ediciones 2024-2025.

Just Entertainment apeló la licitación y ganó el caso ante el Tribunal Administrativo Regional (TAR) el año pasado. El recurso preliminar fue rechazado por el Tribunal Administrativo Regional de Liguria (TAR), que, sin embargo, pospuso la decisión hasta una audiencia sobre el fondo, programada para el 17 de octubre.

Y esta es una fecha importante para entender que, en cualquier caso, más allá de un cierto plazo, la RAI no puede y no quiere buscar respuestas al proceso de negociación iniciado con el Ayuntamiento de San Remo, habiendo sido la única emisora, al final, en presentar la oferta.

Ayer martes 22 de julio de 2025, según lo que ha verificado Il Sole 24 Ore , se celebró una reunión de alto nivel en la RAI sobre el tema. El impasse se hizo patente. Entre las condiciones que desagradan a la televisión pública se encuentra la solicitud del Ayuntamiento de San Remo de un 1% de los ingresos publicitarios del Festival. Esta condición se considera inaceptable, aunque parece que los problemas que más preocupan a los directivos de la televisión pública están relacionados con el hecho de que el Ayuntamiento de San Remo quiere conservar la propiedad de la marca y el formato.