Tendencia positiva de reservas en junio y llegadas desde el extranjero al 55%

Y, sin embargo, algo se mueve. Son los italianos quienes están descubriendo las vacaciones en lo que técnicamente se denomina periodos intermedios, es decir, los meses de junio, septiembre y octubre. Este año, en junio se ha registrado un ligero aumento de llegadas (+1,8%) y de presencias con un +1,3%. Así, en junio se registrarán aproximadamente 15,2 millones de llegadas para un total de más de 53 millones de presencias. Esto es lo que revelan las elaboraciones realizadas por CST - Centro Studi Turistici di Firenze para Assoturismo Confesercenti, basadas en una encuesta realizada a 1.489 empresarios hoteleros italianos. Los negocios hoteleros informan de un aumento en las reservas, especialmente de turistas europeos, en particular de Alemania, Francia, Suiza, Bélgica, Países Bajos, Austria, Polonia y España. Por otro lado, los flujos procedentes de Australia y China han disminuido ligeramente, debido al contexto económico y geopolítico. Tras un largo período de crecimiento, la demanda de EE. UU. se está ralentizando. En cuanto a los italianos, el crecimiento será particularmente limitado, con un aumento del 0,6% en la presencia, para un total de más de 23,8 millones. Mucho más sustancial es el aumento de la presencia de turistas extranjeros (+1,9%), hasta un total de 29,1 millones. Por lo tanto, en el total general de presencias previstas, se registra un primer avance: en junio, la incidencia de la demanda extranjera será del 55%.

A pesar de la incertidumbre del contexto internacional, el turismo sigue dando señales positivas, especialmente gracias a la contribución de la demanda extranjera, aunque se observa cierta discontinuidad en los flujos, a menudo concentrados en los fines de semana —explica Vittorio Messina, presidente de Assoturismo Confesercenti—. Se espera que el buen comienzo de este mes, que marca el inicio de la temporada alta del sector, confirme las previsiones de crecimiento para el verano, y que el buen comportamiento se mantenga también después, dado que el período vacacional se extiende progresivamente hasta septiembre.

Según los empresarios, junio se caracterizará por picos de llegadas los fines de semana relacionados con eventos como la Noche Rosa, que ilumina la costa romañola hasta el domingo, y actividades similares. La demanda se orienta principalmente a destinos de playa y montaña, seguidos de ciudades con arte. El turismo lacustre y rural/de montaña crece a un ritmo más lento (+0,7%).

El cambio climático también afecta a las decisiones de los turistas, con un aumento de la preferencia por las vacaciones en primavera u otoño, en detrimento de las de verano. Esta tendencia generalizada afecta principalmente a todo tipo de ofertas, excepto a la de montaña: una disminución de las solicitudes de reserva durante las olas de calor o una reducción de la estancia media. Los negocios de montaña son los únicos que registran un aumento de reservas coincidiendo con las olas de calor. Se observa un aumento de las cancelaciones de reservas, además de la cuota fisiológica que suelen registrar durante el año, coincidiendo con los avisos de alerta meteorológica emitidos por las autoridades.

El Centro de Estudios Veratour también confirma el crecimiento de las reservas al inicio de la temporada de verano. Solo los volúmenes correspondientes a la temporada de verano, es decir, las reservas confirmadas para viajes entre junio y septiembre, muestran un crecimiento de la facturación de Veratour del +10% en comparación con el mismo período de 2024. Para el conjunto de 2025, el turoperador prevé un aumento del +10% en los volúmenes: la proyección de facturación a finales de año es de 270 millones de euros, con un crecimiento superior al 10%. El gasto medio por viajero es de 1.580 euros. La oferta se renueva y este año Veratour ha lanzado un crucero por las Cícladas a bordo de un yate con 20 camarotes durante siete días por el archipiélago. De este modo, ha logrado captar un nuevo segmento de turismo de alto gasto, ya que el gasto medio por persona es de 2.500 euros.