Si quiere mantener a Epstein fuera de las noticias, tal vez no deba despedir a la persona que lo procesó

Llámenme loco, pero si quisiera quitar el asunto de Jeffrey Epstein de la primera plana de cada ciclo informativo, y si quisiera apaciguar a los elementos más irritables de mi base política, despedir al fiscal federal que procesó tanto a Epstein como a su proxeneta principal, Ghislaine Maxwell, probablemente no sea la solución. De Politico :

Maurene Comey, quien procesó a Jeffrey Epstein e hija del exdirector del FBI, James Comey, fue despedida el miércoles de su puesto en la fiscalía federal de Manhattan, según dos personas familiarizadas con el asunto que solicitaron el anonimato por no estar autorizadas a hablar públicamente. El motivo de su despido no se aclaró de inmediato. No respondió de inmediato a llamadas telefónicas ni a un correo electrónico solicitando comentarios. Portavoces del Departamento de Justicia y de la fiscalía federal declinaron hacer comentarios.

En una mente tan cargada de viejos pecados como la del presidente, esto probablemente parecía una doble ventaja. Libera al Departamento de Justicia del abogado que probablemente sabe más sobre Epstein, Maxwell y su gran círculo de prominentes pervertidos y charlatanes internacionales. Y también se venga aún más de la familia Comey. Y dado que el encubrimiento y la venganza son prioridades de la administración, despedir a Maurene Comey debió parecer un golpe de mano. Sin embargo, una vez que uno sale del confinamiento de la mente del presidente, y después de la ducha de descontaminación obligatoria, se da cuenta de que esto puede convertirse en más problemas de los que merece.

El despido de Comey también se produce mientras la administración Trump, según informes, investiga a su padre, a quien Trump ha denostado durante mucho tiempo. Las investigaciones aparentemente se relacionan con el papel de James Comey en la investigación de los vínculos entre la campaña de Trump de 2016 y Rusia, así como con una publicación reciente de James Comey en Instagram que los aliados de Trump consideraron una amenaza para él. Y en los últimos meses, Maurene Comey ha sido blanco de nuevos ataques por parte de voces de la base derechista de Trump, incluyendo a Laura Loomer, quien pidió a Bondi que la despidiera en mayo. Más recientemente, Loomer ha liderado la protesta de la base MAGA ( Hagamos Nuevamente Grande) contra la decisión del Departamento de Justicia de no publicar más documentos relacionados con Epstein.

¿Acaso este hombre siempre actuará con tan notoria ingratitud hacia quien tanto hizo para que fuera presidente en 2016? La carta de Comey, con su intervención de último minuto, fue más importante para la victoria del presidente que cualquier documento que no estuviera escrito en cirílico. Y, por el amor de Dios, ¿podría dejar de escuchar a Loomer? Es como alcanzar la altitud de crucero y descubrir que tu piloto es Curly Howard.

El despido es el último episodio que ha sacudido la Fiscalía Federal de Manhattan, anteriormente conocida como el Distrito Sur de Nueva York. A principios de este año, el fiscal federal interino y varios otros fiscales renunciaron en protesta después de que el Departamento de Justicia ordenara a la Fiscalía abandonar el proceso por corrupción contra el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams. El miércoles por la noche, los fiscales de la Fiscalía, aún conmocionados por el tumulto, se unieron en apoyo de Comey, y decenas de ellos se unieron para escoltarla fuera de la oficina por última vez, según una persona familiarizada con el asunto.

De nuevo, si intentara enterrar esta historia, lo último que querría es una Fiscalía Federal desquiciada. Claro que no soy un genio estable, así que, ¿qué sé yo?