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Caracoles asesinos, alarma en Australia: matan perros y suponen un riesgo para los humanos

Caracoles asesinos, alarma en Australia: matan perros y suponen un riesgo para los humanos

Existe alarma en Australia por la rápida propagación del llamado "caracol asesino" o gusano pulmonar de la rata. El Angiostrongylus cantonensis es un parásito que ha preocupado a miles de dueños de mascotas. Se está propagando rápidamente y causando la muerte de perros, especialmente en Sídney y Brisbane. Según una nueva investigación de la Universidad de Sídney , se confirmaron 93 casos entre 2020 y 2024, muchos de los cuales involucraron animales que murieron o quedaron paralizados tras ingerir caracoles o babosas infectadas.

El problema preocupa a médicos y autoridades sanitarias porque, aunque es poco frecuente, la enfermedad es potencialmente mortal para los humanos. Se transmite por las larvas del parásito presentes en ratas salvajes. Estas son expulsadas a través de las heces de roedores e ingeridas por caracoles y babosas, que se convierten en huéspedes intermediarios. Cuando un perro las ingiere, incluso accidentalmente, puede infectarse y desarrollar síntomas neurológicos graves. En algunos casos, las consecuencias son irreversibles. El parásito no se contagia de persona a persona.

El riesgo de meningitis para los humanos

Los caracoles gigantes, originarios de África —explica Matteo Bassetti, director de Enfermedades Infecciosas del Policlínico San Martino de Génova—, son capaces de transmitir el parásito, peligroso para la salud humana, ya que afecta el tracto pulmonar y puede provocar meningitis grave. Las fuertes lluvias recientes han favorecido su propagación, especialmente entre Sídney y Brisbane. La angiostrongiliasis es una infección de creciente importancia para la salud pública, ya que la globalización contribuye a su propagación geográfica. Ahora, explica el experto, es necesario seguir colaborando con los distintos países del mundo para monitorear la situación.

La infección, considerada rara pero potencialmente mortal, se ha detectado en un número pequeño pero creciente de perros en zonas afectadas por fuertes lluvias, y ocasionalmente en humanos. Entre 1971 y 2018, se documentaron 28 casos humanos en Australia. El caso más conocido fue el de Sam Ballard , un joven jugador de rugby de Sídney, quien en 2010 aceptó el reto de sus amigos y se comió un caracol de jardín. Contrajo el parásito, entró en coma durante 420 días y luchó contra un daño cerebral grave durante ocho años, hasta su fallecimiento en 2018 a los 28 años.

El gusano pulmonar de la rata

El gusano pulmonar de la rata, o Angiostrongylus cantonensis, es un parásito originario del Sudeste Asiático, pero se ha extendido a otras partes del mundo, como Norteamérica, Europa y Australia. Su huésped natural son las ratas salvajes, pero puede propagarse accidentalmente a otros animales mediante un complejo proceso de transmisión que utiliza caracoles y babosas como huéspedes intermediarios.

Los síntomas

Cuando se introduce en humanos y perros, el gusano pulmonar de la rata puede causar una enfermedad llamada angiostrongoliasis neural. En humanos, se diagnostica como un tipo de meningitis o meningoencefalitis eosinofílica.

Los síntomas en humanos incluyen dolor de cabeza, rigidez de nuca, hormigueo o irritación en la piel, fiebre, náuseas y vómitos. En casos raros, puede causar daño cerebral permanente o ser mortal, especialmente en personas con sistemas inmunitarios debilitados.

En los perros, la enfermedad provoca parálisis, incontinencia urinaria y respuestas anormales al dolor. El tiempo transcurrido entre la ingestión de un caracol infectado y la aparición de la enfermedad suele ser de una a tres semanas. Tanto los humanos como los perros pueden enfermarse si ingieren un caracol crudo con larvas o verduras sin lavar, como la lechuga, contaminadas con baba infectada.

El cerebro

La investigadora de doctorado de la Universidad de Sídney, Phoebe Rivory , autora del estudio reciente, explicó que no es el parásito en sí el que causa el daño, sino los intentos del cuerpo por combatirlo. "En perros y humanos, el parásito entra en el cerebro, pero en lugar de progresar a los pulmones como en las ratas, es eliminado en el cerebro por nuestra propia respuesta inmunitaria. Es esa respuesta inmunitaria manifiesta la que causa fuertes dolores de cabeza y sensaciones", explicó Rivory. New South Wales Health afirma que es raro que los humanos desarrollen meningitis en respuesta al gusano pulmonar de la rata, y la mayoría de las personas que la contraen no presentan ningún síntoma, mientras que otras pueden tener solo síntomas leves y de corta duración.

¿Por qué están aumentando los casos?

Investigadores de la Universidad de Sídney analizaron la prevalencia de la enfermedad en perros, considerando que constituyen una población centinela para los humanos. Esto significa que el aumento de las tasas de la enfermedad en perros podría ser una señal temprana de riesgo de enfermedad en humanos. Los investigadores analizaron 180 muestras clínicas tomadas entre 2020 y 2024 de perros con sospecha de haber padecido la enfermedad y confirmaron 93 casos, todos en Sídney y Brisbane o sus alrededores, con una tendencia gradual al alza. También detectaron un pico de 32 casos en 2022, correlacionado con las altas precipitaciones, que tienden a potenciar la reproducción de caracoles.

Prevención

Las autoridades sanitarias recomiendan medidas preventivas, entre ellas lavar bien las frutas y verduras; evitar que los perros ingieran caracoles, babosas o hierba mojada en los parques después de la lluvia; y evitar el contacto directo con caracoles o ranas, especialmente en zonas rurales o tropicales.

repubblica

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