Marlene Santos Alejo: Balance de la jornada

▲ Desesperado, Infantino, presidente de la FIFA, quiere que CR7, campeón de la UEFA Liga de Naciones, entre de refuerzo e imán de taquilla en cualquier equipo del Mundialito.Foto Ap

L

a cosa pinta peor un cuarto de siglo después. Hacia el Mundial Corea-Japón 2002, Javier Aguirre contaba con Gerardo Torrado, Francisco Palencia, Rafael Márquez, Jesús Cabrito Arellano, Óscar Pérez, Ramón Morales, Cuauhtémoc Blanco, Jared Borgetti… pero, sobre todo, tenía al lado a un director de orquesta que sabía de futbol, con poder y visión: Alejandro Burillo Azcárraga, quien junto con el Vasco irrumpió para salvar la nave. Fue preciso relevar a Enrique Meza, ya que el boleto a la Copa del Mundo estaba en jaque luego del aztecazo sufrido frente a Costa Rica, el 16 de junio de 2001.

Burillo había tenido el gesto de enviar de su propio peculio al Vasco Aguirre a capacitarse al Real Madrid (1996-97), y a pesar de que existía buena química, no faltaron roces entre ellos por temas de patrocinios con las refresqueras de sabor cola… Se logró el pase al certamen, el alma le volvió al cuerpo a Emilio Azcárraga Jean y al propio Burillo, entonces dueño del contrato de comercialización del Tri, quien vistió al equipo con su marca ABA (letras de sus iniciales); además, presumió su influencia en la FIFA al lograr una reducción de castigo para Arellano.

En efecto, Burillo lucraba en su beneficio, pero también dio fuerte impulso. En su gestión se logró la Copa Confederaciones 1999 con Manuel Lapuente en el timón, así como la participación en torneos de la Conmebol. Ya lo dijo Gerardo Tata Martino, el balompié de esa región está peldaños arriba del de Concacaf en cuanto a calidad. Gracias a ello, el técnico tricolor pudo reforzar su plantilla con el subcampeón de la Copa Libertadores, el Cruz Azul, y se preparó hacia el Mundial durante la Copa América Colombia 2001.

Sin embargo, en la cancha no pasó nada importante en tierras asiáticas. Ayer como hoy el objetivo es sólo participar, agitar la matraca, hacer bulla. Es más, aquel Mundial terminó mal. El Tri regresó con caras largas y sin Aguirre, peleado con el Cuau y con Palencia, y, en gesto reprobable, no volvió a México, se fue directo al Osasuna… En el aeropuerto de la capital mexicana el único que recibió vítores fue el Conejo Pérez… Además, se desató tremendo pleito entre los primos Azcárraga, con amenaza de demandas en torno a contratos sobre el tricolor.

Hoy el futbol mexicano está peor. Caótico. Los dueños de equipos andan de pleito y en total incapacidad para unificar criterios; no hay un líder entre los de pantalón largo, a la salida de Juan Carlos Bomba Rodríguez pusieron a un par de improvisados, sin historia ni autoridad; más de la mitad de los clubes ignoran a las fuerzas básicas, están saturados de foráneos con poco para ofrecer al Tri; no se asiste a torneos importantes, pero sobre todo, sin descenso la Liga Mx decayó hasta el suelo y está a punto de extinguir a la Liga de Expansión… Una lucecita es la Sub-20 femenil de Doriva Bueno.

Para Televisa el negocio hacia el Mundial 2026 está hecho, pero en lo deportivo el único clavo para afianzarse es la experiencia del timonel. Hoy más solo que nunca… Más allá del guiño a los periodistas con bromas y chascarrillos, lo crucial es el tema cancha. Tras la derrota ante Suiza y superficial autocrítica, Aguirre se fugó por el tema viril, quiere que a base de recibir mentadas y derrotas sus pupilos levanten cabeza y saquen pecho. Les dio lapidaria tunda, dijo que les temblaron las patitas, los llamó equipo sin personalidad… ¿Es esa la estrategia?

Sigue otro ensayo frente a Turquía y toca al Tri iniciar la Copa Oro, el sábado ante República Dominicana en la convulsa ciudad de Los Ángeles. Estados Unidos vive una fuerte caída en turismo, las redadas contra presuntos ilegales y el tono hostil del mandatario Donald Trump hacia el mundo entero se está reflejando en lo deportivo. El amistoso México-Suiza, en Salt Lake City registró apenas unos 30 mil asistentes. El martes jugará contra los turcos en Carolina del Norte.

El Mundialito, también inicia el sábado y será deficitario: exorbitantes premios y escasa taquilla. Los precios de los boletos cayeron de 350 a 55 dólares. No hay demanda, la gente sólo se interesa por ver al Real Madrid y al Boca Juniors. Gran chasco para Gianni Infantino, titular de la FIFA, quien creyó que en Estados Unidos iba a recoger carretillas de dólares, y que tras el fracaso del América busca encajar al luso Cristiano Ronaldo en cualquier equipo participante.