El PP catalán pide que la ponencia aclare que no se pactará con el soberanismo

El PP de Catalunya considera que debe trasladar sus ideas en la ponencia política que se debatirá en el próximo congreso del partido en lo que se refiere a las cuestiones que emanan de la política catalana de los últimos años, marcados por el procés. En este contexto, y según dirigentes territoriales consultados, quieren que el documento que guiará el futuro del partido establezca con claridad que no se puede pactar con formaciones cuyo objetivo es “trocear la soberanía nacional”.

Se hace alusión, obviamente, a Junts, y desde sectores del PP catalán se estima que es el momento de definir con claridad una línea de actuación en esta materia, y evitar excesivas ambigüedades con respecto a la política de pactos. Dirigentes de los populares catalanes, por tanto, están ultimando si presentan enmiendas para que la ponencia política sea más concreta sobre los eventuales pactos postelectorales. No se trata, subrayan, de abrir batallas internas sino de hacer una aportación desde Catalunya a un debate que conocen a fondo y les compete aportar sus ideas.

Los populares catalanes priorizarán el debate territorial en el congreso de julio

La ponencia política presentada esta semana pasada en Sevilla, y a partir de la que se abre el debate para el congreso que empezará el 4 de julio, reflexiona al respecto en el epígrafe “ni cordones arbitrarios, ni mayorías incoherentes”. En referencia a la política de pactos señala que ni el PP va a renunciar a sus propios valores, ni entrará en “subastas políticas”, ciñendo cualquier negociación al marco constitucional. La ponencia, que sigue la línea del líder del partido, Alberto Núñez Feijóo, opta por no entrar en excesivas referencias a otras formaciones, al entender que lo que se debe presentar es un proyecto propio para gobernar en solitario, sin entrar en otros escenarios a futuro.

En este contexto, el presidente de los populares catalanes, Alejandro Fernández, siempre ha señalado que buena parte del electorado popular no quiere que Junts sea el árbitro de la política española, como lo está siendo en esta legislatura con el PSOE. Sectores del PP catalán, que consideran que trasladan un parecer mayoritario, estudian así trasladar vía enmiendas una mayor concreción en los planteamientos sobre los pactos, y marcar las líneas rojas ideológicas.

Sectores del partido creen que hay que trasladar a una posición clara con respecto a las relaciones con Junts

Otra cuestión sobre la que quiere incidir el PPC desde Catalunya es en la necesidad de clarificar las competencias en el Estado de las autonomías, para fijar a qué administración le corresponde cada una. En la ponencia presentada esta semana por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, ya se hace referencia a la necesidad de “preservar y reforzar el núcleo de competencias indelegables del Estado, que en “ningún caso pueden estar sometidas a negociación” (política exterior, defensa, inmigración, administración de justicia…).

En esta línea, desde sectores del PP de Catalunya se baraja la posibilidad de solicitar que la ponencia recoja una reforma constitucional para el blindaje de competencias. No es una cuestión cerrada, pero serviría también, según los dirigentes consultados, para que el PP defina un modelo de Estado propio, cuando formaciones desde el PSOE hasta Vox tienen propuestas muy claras.

Se debe definir cómo en el Estado de las Autonomías se fijan las competencias, señalan desde Catalunya

Hay que tener un modelo bien definido, se señala, que puede suponer plantear una reforma constitucional o proponer otras vías. El blindaje competencial también supondría evitar que las competencias se conviertan en un cajón de sastre del que tirar cuando conviene. Es decir, que en un hipotético escenario de negociaciones para una investidura, en caso de que no se logre una mayoría suficiente, no se recurra siempre al traspaso competencial sino que se arbitren consensos en torno a otras cuestiones como políticas económicas, sociales o inversiones.

Dirigentes del PP catalán van a centrar, por tanto, su aportación en el debate del congreso en estos puntos de la ponencia política, siempre bajo la premisa de que ha de ser un intercambio de ideas sosegado en un cónclave que busca, sobre todo, el fortalecimiento de Alberto Núñez Feijóo ante unas futuras elecciones generales. Además, el contexto de debilidad actual del presidente Pedro Sánchez y del PSOE enfatiza el objetivo común de que el congreso sirva de impulso en clave electoral.

En cuanto a la ponencia de estatutos, no habrá una actuación coordinada aunque Alejandro Fernández ya se ha mostrado partidario de las primarias puras. Una cuestión en la que se observa la línea de actuación de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Así como se analiza también el apartado de la ponencia que aborda la celebración de los congresos autonómicos, donde se abre la puerta a que su calendario pueda ser modificado si así lo aconseja la situación política. Como es conocido, el congreso del PP de Catalunya sigue pendiente.