Si no fuera por Tusk, Trzaskowski podría haber ganado

¿Cuáles fueron las principales diferencias en las estrategias de campaña de Rafał Trzaskowski y Karol Nawrocki antes de la segunda vuelta de las elecciones?

Karol Nawrocki basó su estrategia en distanciarse del grupo que le daba apoyo formal, Ley y Justicia. No fue un distanciamiento total para no desanimar a los votantes de este partido, pero sí hubo acciones visibles que enfatizaron el carácter ciudadano de su candidatura. Emblemática en este contexto fue la marcha una semana antes de las elecciones, durante la cual el propio Nawrocki se dirigió a los participantes, mientras que los líderes del PiS, encabezados por Jarosław Kaczyński, permanecieron en la sombra. Cabe mencionar también la conversación de Karol Nawrocki con Sławomir Mentzen, durante la cual, buscando complacer a los votantes del líder de la Confederación, se mostró escéptico sobre las acciones del gobierno de Mateusz Morawiecki. Rafał Trzaskowski optó por una estrategia diferente. No se distanció de su partido original. Durante la marcha de apoyo, los líderes de los grupos que conforman la coalición de gobierno aparecieron junto al candidato. La estrategia de Trzaskowski se basó en movilizar a los votantes de la llamada coalición el 15 de octubre, a la vez que buscaba el apoyo de quienes votaron por Sławomir Mentzen en la primera vuelta. Esta estrategia fue difícil de implementar dadas las importantes diferencias ideológicas entre los distintos segmentos del electorado.

¿Cómo influyó el apoyo de Sławomir Mentzen en el resultado de la segunda vuelta? ¿Fueron sus votantes quienes decidieron, o quizás los indecisos?

Esta influencia fue fundamental. De forma simplificada, se podría decir que fue gracias a la convicción de los votantes de Sławomir Mentzen que Karol Nawrocki ganó las elecciones. Casi 9 de cada 10 votaron por el candidato apoyado por el PiS. Si estas proporciones hubieran sido más equilibradas, Trzaskowski habría llegado a un mayor número de jóvenes con una atractiva oferta electoral, y podría haber cosechado el éxito final.

¿El “estreno” de la campaña, es decir, la fuerte implicación del gobierno en la promoción del candidato, tuvo un impacto significativo en el resultado electoral?

Donald Tusk no goza de la confianza pública. Los votantes del PO lo perciben positivamente, pero un gran número de votantes lo abordan con reservas. Su participación sin duda tuvo un efecto movilizador en el electorado, que aprobó la política del gobierno, a la vez que movilizó a los votantes escépticos hacia los políticos de Plataforma. Muchos votantes votaron por Nawrocki no porque apreciaran sus cualidades, sino precisamente por una motivación negativa. Tusk los afectó como un trapo rojo a un toro. Su participación en el final de la campaña motivó a algunos votantes a acudir a las urnas y votar en contra de Rafał Trzaskowski.

¿Cuáles fueron las principales motivaciones de los electores en el contexto de la fuerte polarización del escenario político?

Creo que fue principalmente una motivación negativa. Algunos votantes votaron por Karol Nawrocki principalmente para dificultarle a la coalición gobernante la implementación de su programa. A lo largo de la campaña, los políticos de Ley y Justicia advirtieron contra el "cierre del sistema", es decir, una situación en la que el gobierno y el presidente pertenecen al mismo bando político. A su vez, una fuerte motivación para un gran grupo de personas que votaron por Rafał Trzaskowski fue votar por el mal menor y elegir a un político menos polémico.

¿Qué importancia tuvieron las controversias en torno a los candidatos, como las acusaciones contra Karol Nawrocki, en el resultado final de las elecciones?

La controversia influyó en el resultado final. Si Karol Nawrocki hubiera evitado una serie de crisis de imagen durante la campaña, probablemente habría obtenido un resultado más favorable. Sospecho que hay un grupo de votantes que, a pesar de la alta polarización, la cercanía ideológica al PiS y la aversión al gobierno actual, sintió un gran malestar con el pasado de Karol Nawrocki y finalmente no votó por él. A su vez, hubo un grupo de votantes que se movilizó para ir a las elecciones y votar en contra de Nawrocki, precisamente por las controversias asociadas con él. Ciertamente, entre los votantes también hubo quienes interpretaron las acusaciones contra Karol Nawrocki como una forma de lucha política y se sintieron motivados a apoyar su candidatura.

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