Justin Bieber es perseguido por fotógrafos y pierde los estribos

El jueves 12 de junio de 2025, Justin Bieber tuvo una tensa situación con los paparazzi en Malibú, California, mientras se dirigía a su coche después de una cita. El cantante se encontraba frente a Soho House cuando fue abordado por fotógrafos que, una vez más, lo persiguieron con sus cámaras. El cantante, visiblemente molesto, expresó su frustración y les pidió a los fotógrafos que lo dejaran en paz.

"¿Estás bien, Justin?", preguntó uno de los paparazzi, pero la respuesta de Bieber fue dura: "No delante de mi coche. ¿Cómo creen que está bien que se pongan en mi cara? ¡Quítense de mi camino!".

La situación se intensificó rápidamente, y el equipo de seguridad del cantante intentó mantener alejados a los fotógrafos, pero fue en vano. El cantante se acercó al grupo y declaró: "No me pregunten cómo estoy. No tengo miedo de poner límites". En un momento de arrebato, Bieber reafirmó su postura: "Soy padre de un niño. No, soy padre de un niño de verdad. Basta. Soy un padre de verdad, con una familia de verdad". El cantante enfatizó sus responsabilidades familiares, las cuales, en su opinión, deben ser respetadas.

Aunque intentaron restarle importancia a la situación, los fotógrafos siguieron grabando y usando flashes, lo que llevó a Justin a acusarlos de distorsionar la realidad para generar controversia. Declaró: "Van a sacar este video de contexto. Van a decir que estoy loco". El cantante también criticó la profesión de los paparazzi, destacando el costo humano que implica la persecución incesante de famosos: "¿Creen que esto es un juego? No, estamos trabajando, hombre. Eso es todo".

En un momento dado, uno de los fotógrafos intentó rebajar la tensión deseándole a Bieber un feliz Día del Padre, pero él no dudó en responder: "No me digas feliz Día del Padre porque no te conozco". El cantante dejó claro que, a pesar de su fama, no aceptaría que lo trataran de forma invasiva ni irrespetuosa. "No importa si soy famoso o no. No importa. ¿Crees que esto es un juego?", preguntó, aún más irritado.

Bieber terminó su discurso con una sentida súplica a los paparazzi, rogándoles que le permitieran vivir su vida con más privacidad. "Soy un padre de verdad, un esposo de verdad, un hombre de verdad. Así que no me hagan esta mierda", dijo. El incidente ilustra una vez más la presión constante que enfrentan las celebridades, especialmente cuando intentan vivir momentos privados y tranquilos lejos de los focos.