Hacia dónde fluye el dinero. NI descubrió cómo el Kremlin distribuye los subsidios a las regiones.

El Ministerio de Finanzas alerta: en junio de 2025, los ingresos del presupuesto federal por petróleo y gas disminuyeron un 33,7 % interanual. Debido a los bajos precios de los hidrocarburos y la fortaleza del rublo, el tesoroperderá 25.820 millones de rublos en julio.

Moscú sobrevivirá con sus propios ingresos, pero la mayoría de las regiones de Rusia reciben subsidios. Su bienestar depende directamente de los ingresos del presupuesto federal. La Ley de Presupuesto para 2025 establece que 63 entidades federativas de la Federación Rusa recibirán apoyo financiero. Las 26 regiones restantes se autoabastecen y abastecen a todos los demás.

Nuevos territorios han irrumpido en la cima de las regiones más subvencionadas. La República Popular de Donetsk recibirá 77.800 millones de rublos este año, lo que la sitúa inmediatamente en segundo lugar. La República Popular de Lugansk se ha unido a las diez regiones más dependientes de Moscú: recibirá 54.000 millones de rublos. En total, las nuevas regiones recibirán 153.500 millones de rublos del gobierno federal en 2025 para equilibrar el déficit presupuestario. Crimea y Sebastopol exigen otros 33.800 millones de rublos. Nadie dijo que la expansión de Rusia sería barata.

Es fácil y conveniente dividir las regiones en regiones subvencionadas y regiones donantes. Queda claro de inmediato quién gana dinero y quién supuestamente es un parásito. En realidad, todo es más complicado. "NI" realizó un estudio, examinó los últimos informes del Tesoro y descubrió quién en la Federación Rusa vive realmente a expensas de otros.

La división de las regiones en donantes y subvencionadas se basa únicamente en un criterio: si una región, república o territorio recibe subvenciones para equilibrar la dotación presupuestaria, se considera subvencionada. Si no las recibe, actúa como donante.

Pero el dinero para la igualación presupuestaria, es decir, para subsanar las deficiencias presupuestarias, es solo uno de los muchos tipos de subsidios. Las regiones reciben fondos de Moscú para prestaciones sociales, subsidios a agricultores, aumentos salariales a empleados del sector público, etc. En total, los ingresos gratuitos pueden superar en decenas de veces los subsidios para la igualación presupuestaria. A veces, las regiones donantes reciben tal apoyo que incluso las regiones subvencionadas más desesperanzadas las envidiarían. La ayuda monetaria del presupuesto federal se destina a absolutamente todas las regiones.

Esta distribución tiene lógica: los subsidios específicos dependen de la población de la región. Cuanta más gente viva allí, más dinero se necesitará para prestaciones sociales y de otro tipo. Para evaluar de forma justa la cantidad de dinero absorbido, NI calculó cuántos rublos de subsidio se asignan por residente de la región.

Resulta que las regiones del Cáucaso, donde se construyen palacios con ingresos mínimos y donde se puede conocer fácilmente a gente en coches súper caros, tuvieron un comportamiento muy modesto.

Se perfila una imagen muy clara: las regiones más costosas para el presupuesto federal son el Lejano Oriente y el Lejano Norte.

Con el actual sistema de distribución de impuestos, ninguna entidad puede autoabastecerse. Tomemos, por ejemplo, el Distrito Autónomo de Yamalo-Nenetsia: hay mucho gas, pero poca gente: solo medio millón. No se requieren subsidios para la igualación presupuestaria, pero otras ayudas gratuitas ascienden a 53.800 millones de rublos, o 103.105 rublos al año por persona. Si se reducen estos pagos, las finanzas tanto de las personas como de las empresas sufrirán gravemente.

Y aquí surge la cuestión de la equidad en la distribución del dinero. La región de Samara está lejos de ser la más rica, ocupando el puesto 34 en términos de bienestar poblacional. En Moscú, hay 36.756 rublos per cápita, y las autoridades municipales pueden permitirse gastar miles de millones en la reconstrucción de patios, incluso en contra de la opinión de los residentes locales.

Así pues, la reducción del presupuesto federal puede afectar a los residentes de absolutamente cualquier región. Todo depende de qué subsidios y subvenciones se recorten, de cómo se comporten las autoridades locales y de cuánto dinero logren sacar del Kremlin.